martes, 13 de marzo de 2012


DAMSI FIGUEROA



Autorreconocimiento



Yo no soy la que se pierde
tan pronto como se la encuentra
El amor en mí no se toca
se escribe
Yo no soy piadosa con los hombres de poca fe
no intercambio los calzones con nadie
en cambio asumo la desvergüenza
de una desnudez colectiva
en una casa de playa
o en una playa a secas
Yo no escribo para nadie
aunque intente escapar
y evite sacarte al baile
Tus malabares y piruetas
siempre exigen un aplauso cerrado
es decir, una palabra
Yo no me complico la vida
omitiendo adverbios y conjunciones
Patino por la hoja
y tapo los surcos amargos
con la sangre de mis amigos
Yo no hago el amor
lo desarmo
por el puro gusto de volverlo a armar
una y otra vez
hasta tener sexo
para olvidarme del amor
y de todos ustedes


JORGE MONTEALEGRE



Requerimientos


A ti
que no te escribo casi
porque estás cerca
porque nos tocamos
porque vivimos juntos
quería escribirte justamente eso

*

No soy tu tipo, es verdad: yo soy mío.

*

El desamado vaga por la playa en el invierno.
La envidia me recorre.

*

Recibí un telegrama.
Te quiero, dice.
¿Y para qué será?
me digo, tiritando.

*

Está mirándome, la muy paloma.

*

La pasión va por dentro, cubrecama.

*

Húmedo recorro el camino
caracol
de tu oreja: un secreto
perdido
entre las mil y una noches.

*

Te pienso abriendo una avellana con los dientes.
Me duelo mordido.

*

Araña por la espalda. Viuda negra, mañosa.

*

Despacio
me gusta decírtelo
al oído: que me gustas
así,
des pa rra ma da.

*

No entiendo tu celo: nada tienes que perder.

*

Besos a lo humano, halo divino.


ANTONIO MACHADO




CXXXV

Proverbios y cantares


XXIX


Caminante, son tus huellas
el camino y nada más;
Caminante, no hay camino,
se hace camino al andar.
Al andar se hace el camino,
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de volver a pisar.
Caminante no hay camino
sino estelas en la mar.


NICANOR PARRA





El hombre imaginario


El hombre imaginario
vive en una mansión imaginaria
rodeada de árboles imaginarios
a la orilla de un río imaginario

De los muros que son imaginarios
penden antiguos cuadros imaginarios
irreparables grietas imaginarias
que representan hechos imaginarios
ocurridos en mundos imaginarios
en lugares y tiempos imaginarios

Todas las tardes imaginarias
sube las escaleras imaginarias
y se asoma al balcón imaginario
a mirar el paisaje imaginario
que consiste en un valle imaginario
circundado de cerros imaginarios.

Sombras imaginarias
vienen por el camino imaginario
entonando canciones imaginarias
a la muerte del sol imaginario.

Y en las noches de luna imaginaria
sueña con la mujer imaginaria
que le brindó su amor imaginario
vuelve a sentir ese mismo dolor
ese mismo placer imaginario
y vuelve a palpitar
el corazón del hombre imaginario.