Firme
aquí: mi firma es redonda y fina
Hace
justo un año fui testigo contra mi marido por abusos sexuales de otra.
Desde
entonces Carabineros ronda por mi casa
pues
su hermana juró vengarse. Él está preso
y
así esposado viene a la audiencia de divorcio.
Los
niños querían acompañarme para verlo, porque lo aman tanto como yo.
Si
me ensucio, ahí no es donde me limpio: me interesa la limpieza del paño.
Me
duele ver de pie al gendarme y a espaldas de mi esposo, ojalá nadie pase por
aquí.
No
quiero rearmar mi vida. Yo me miré al espejo esta mañana y lloré.
Vine
tarde a la audiencia. Quién sabe si se suspendía,
como
el almuerzo cuando él no llegaba.
No hay comentarios:
Publicar un comentario