viernes, 29 de abril de 2016

ALFONSO REYES




Oda nocturna de la esposa



Esta noche todos los pájaros
quieren cantar.
¡Ah, dejemos dormir la monótona
ley del hogar!
No me brindes tanto reposo,
que soy de pasión.
Ni he de echar el aceite al fuego
ni la sal, señor.
Cultivaré más bien tus cantos,
y de mi amor
Ya tendrás un hijo armonioso
como Euforïón.
Nuevo amor te ofrezco que aliente
sólo de cantar,
de reír, de agitar antorchas
y de danzar.
Danzas pide la noche, amigo,
y es fuerza osar;
deja andar mis pies en la danza
déjalos andar.
Esta noche todos los pájaros
quieren cantar.
¡Ah, dejemos dormir la monótona
ley del hogar!
A las cotidianas faenas
me libertaré,
tú estarás ansioso admirándome
y yo danzaré.
Yo, a gustar la noche libérrima,
que soy de pasión;
Y tú, a la mejor de tus siembras:
las semillas de tu canción.
Nuevo amor te ofrezco que aliente
sólo de cantar,
de reír, de agitar antorchas
y de danzar.
Ya te daré un hijo armonioso,
como Euforïón.
Esposo:
oye, deja andar mis pies en la danza,
que soy de amor.



("ODA NOCTURNA DE LA ESPOSA", Constancia Poética OC X)

No hay comentarios:

Publicar un comentario