miércoles, 25 de diciembre de 2024


 

TAKAKO ARAI

 


 

Vidrio de color²¹

 


Lo levantaré en mi pancita
Lo romperé
Aplastando el gusano amargo entre mis dientes²²
Si lo trago
Dudo que escupa una polilla
O que salga volando como una mariposa
Supongo que seguirá siendo un gusano de seda escupiendo seda para siempre

 

                                  Quizá se convertirá en una rueca girando alrededor de su propio cuello
                         El eje soltando un traqueteo rítmico bajo el techo de dientes de sierra²²
                Su brazo extendido mientras se da la vuelta
        Sus rodillas temblando un poco

 

Me lo tragaré
El gusano de seda
Por el pozo de mi garganta
Donde rebota en la boca de mi estómago
Este pequeño gusano escupirá un salvavidas
Y se arrastrará desde las profundidades acuosas
Olvidando sus sueños de volar por los aires

 

                                     En esta extraña fábrica, el gusano gira en la rueca
                               El hilo de seda en bruto devana ante nuestros ojos
                         Las tijeras se deslizan, y está bien atado
        Pulso vibrante por el esfuerzo

 

Warawara²⁴ ¿estás invitando al hilo?
          Llevado lejos
Somosomo       ¿estás tocando el hilo?
           Riéndose de
Sawasawa²⁵
 ¿estás alineando al hilo?
          Calumniado
Moshimoshi²⁶     ¿estás resentido con el hilo?
         Olvidado
         Exaltado
         Indecible
Canta²⁷: Haz girar tus manos     vuelta tras vuelta      alarga tus ojos
           Haz girar tus manos      vuelta tras vuelta       alarga tus ojos
           Haz girar tus manos     vuelta tras vuelta      sácate los ojos

 

¡Me lo tragué!
Al eterno gusano de seda
En su misión para siempre
Arrastrándose por el laberinto de mis entrañas
El amargo gusano aplastado entre mis dientes
En el hilo susurrante gira
Se ata a sí mismo
Se retrae
Y duerme

 

No puede dormir,
No puedo dormir,
Canta:  Haz girar tus manos     vuelta tras vuelta       alarga tus ojos
            Haz girar tus manos     vuelta tras vuelta        sácate los ojos

Lo sostengo sobre mi cabeza


                       Hay una fábrica flotando como una isla en el interior²⁸
                   Su cabeza da vueltas y vueltas
             mientras los ciegos gusanos de seda brillan
         Debajo de la ventana de vidrio de color

 

 

21.- Inspirado en la caída de la seda y de la industria textil en Kiryū. En este poema Arai imagina que una persona se traga a un gusano de seda que crea su propia fábrica en el estómago.

22.- La expresión japonesa Nigamushi o kamitubusu” significa masticar un gusano amargo entre los dientes, y ello refiere a las muecas o a fruncir el ceño.

23.- Muchas de las fábricas textiles en Kiryū tenían techos que zigzagueaban hacia arriba y hacia abajo como los dientes de una sierra, tiempo después se colocarían ventanas de vidrio a un lado de cada diente” del techo para dejar entrar la luz.

24.- En japonés se utiliza para describir el ruido y la conmoción que se dan cuando se reúne mucha gente.

25.- Onomatopeya para expresar el sonido delicado hecho por el movimiento de cosas como son las hojas o el papel.

26.- El equivalente en español mexicano de esta expresión sería: bueno, bueno/ hola, hola/ aló, aló, de cuando contestamos el teléfono.

27.- Kaiguri kaiguri totto no me es la canción de un juego infantil, en el que los niños enrollan sus manos entre sí como si fueran una rueca para enredar hilo, luego tiran de la esquina de sus ojos. Lo que se crea aquí es una variación de esta canción, imaginando que la narradora se saca los ojos.

28.- Hace alusión a una mini-fábrica de seda flotando en el estómago del narrador, los vidrios de colores en el techo de dientes de sierra iluminan el interior.

 

HIROMI ITŌ

 

 

 

Yo soy Chito

 


La primera vez que supe de los coyotes

Fue en un libro llamado (en japonés) Animales de Seton para niños y niñas

Ahí encontré a Lobo el rey lobo, carneros, una familia de jabalíes, conejos con cola de algodón y mapaches, pero eran las historias del sabio coyote las que me gustaban más

Leía el libro una y otra vez, una y otra vez, me enseñaba la sabiduría de los conejos, lobos, jabalíes salvajes, pero nada sobrepasaba a la sabiduría del coyote

Tito fue criada por humanos, constantemente inmovilizada por una correa

Nadie la amaba, la molestaban hasta hacerla huir

Ella aprendió a sobrevivir

Correr por su vida con sus cachorros en el hocico

Intentando alejarse de los perros y de la gente

Leí sobre ella una y otra vez, una y otra vez

Había un mapa de América en el frente del libro con pinturas de animales donde las historias tomaban lugar: coyotes en las planicies centrales, lobos en el suroeste y el norte, en el resto había conejos de algodón, jabalíes y perdices

Durante mi infancia, eso era América para mí

¿Dónde quedó ese libro? Ya no vivo en la casa de mi infancia, ni siquiera en la misma ciudad, ni en el mismo país, perdí mi lugar ahí, perdí personas y relaciones, casi pierdo a otros, perdí mi lengua, pero ¿qué hay sobre ese libro que leí una y otra vez, una y otra vez?

Debí haberlo perdido también

Recién el otro día

lo busqué en Amazon

y apareció justo ahí, y lo ordené de inmediato

Lives of the Hunted, se llama en inglés

Publicado en 1901, reimpreso en 1967

Llegó a mi casa

Un libro antes de librería, con la palabra descartado impresa en él con grandes letras, probablemente la librería no lo quería porque las historias son demasiado crueles para la juventud de hoy, en estos días los niños están acostumbrados a matarse unos a otros en el mundo virtual, y aun así, las historias son demasiado crueles, una madre coyote estaba dando a sus cachorros su leche, los lamía cuando los cazadores la asesinaron, sus cachorros huyeron hacia su guarida, solo para ser arrastrados fuera, uno a uno

Así es como el libro lo describe:

Incluso a esta edad había cierta individualidad de carácter entre los cachorritos. Algunos de ellos chillaron y algunos de ellos gruñeron mientras los arrastraban para morir. Uno o dos intentaron morder. El que había sido el más lento para comprender el peligro, había sido el último en alejarse, así que estaba hasta arriba de la pila y por tanto fue el primero en morir, y ahora está acurrucado hasta abajo. La que fue la primera en percatarse del riesgo se había retirado primero y ahora estaba agazapada hasta abajo de la pila. Fríamente y sin remordimientos, los otros fueron matados uno a uno, y entonces esta prudente cachorra parecía ser la última de su familia. Permaneció perfectamente quieta incluso cuando la tocaron, sus ojos mitad cerrados, como si, guiada por el instinto, intentara jugar a las “estatuas de marfil”. Uno de los hombres la levantó. Ella no chilló ni se resistió.

Ni chilló

Ni se resistió…

El libro estaba en inglés, pero podía leerlo rápidamente

Pues recordaba al japonés

Que había leído una y otra vez, una y otra vez

Todos los cachorros de coyote fueron asesinados

Solo una sobrevivió, una sola cría

Arrojada con sus hermanos muertos a un costal y llevada a la granja

En el original, los cazadores la nombran Tito

Por eso era que yo sospechaba haberlo leído en una traducción antigua, no se podía esperar que los niños de Japón de entonces pudieran pronunciar un sonido desconocido como ti, pero esa era la versión que me había llegado

Así que para mí, el nombre siempre fue Chito

Yo siempre fui Chito

Wow-wow-wow-wow-wow-w-o-o-o-o-o-o-w

Recuerdo su voz

Cuando era niña, leía el libro una y otra vez, una y otra vez

Así es cómo lo describe el libro:

un anhelo innato para cantar

Sus canciones eran

un anhelo de cortos ladridos

mezclados con lloros dolorosos

Wow-wow-wow-wow-wow-w-o-o-o-o-o-o-w

Así es como lo describe el libro:

cuando el sol se ocultó ella sentía el impulso de cantar aquella canción salvaje del Oeste que tanto significa para los Coyotes. No es la invención de un individuo ni del presente, fue construida del sentir de los tiempos todos y los Coyotes todos lentamente.

No sé si recuerdo el japonés correctamente

No es divertido hacerse grande, olvidar todas las cosas importantes como aquella

No es la invención de un individuo ni del presente,

fue construida del sentir de los tiempos todos y los Coyotes todos lentamente y

Sus experiencias todas enfatizaron para esa vieja idea del “bajo perfil”―

que es permanecer callada, discreta, y esconderse cuando halla peligro a la vista

Esas fueron las cosas más importantes que aprendí de niña

La sabiduría de Chito

Cómo sobrevivir

Mirando el libro recordé porqué

Vine a este lugar llamado América

Las cosas más importantes que aprendí de niña

Estaban en ese libro que leí una y otra vez

Quizá las perdí por un tiempo

O solo las olvidé

El destino de los animales, sus vidas y muertes

Sus vidas sobre las llanuras, y mi vida también

Chito fue asesinada una y otra vez

Pero cada vez volvía a la vida

Los humanos tenaces, persistentes, la mataban

Ella los engañaba y era engañada de vuelta

Ella esparcía sus heces, entraba en calor

Entre más la cazaban

Más aparecían las cosas dentro de foco

En otras palabras, todas las cosas que ella pensó durante el camino

No la invención de un individuo ni el presente

Sino lentamente construir los sentimientos de todos los Coyotes de todas las edades

Era por Chito

Por Chito

Que abandoné mi casa, compré un boleto de avión

Y vine a este lugar

Había alguien a quien apenas conocía, apenas y guardaba su esencia

Y aun así seguí a mi nariz y lo perseguí

Encontré un cuarto, renté un coche

Y me quedé los tres meses de permiso sin visa, pensé que intentaría quedarme

Cuando la gente me pregunta porqué vine, decía

Soy poeta, vine a aprender las tradiciones de los americanos

Nativos

Y era verdad

Pero ni yo sabía lo que quería saber

No sabía a dónde ir

No sabía a quién preguntar

Era terrible hablando con la gente en mi lengua nativa, así que en inglés era casi imposible, no podía ni decirles quién soy (me tomó décadas decirlo incluso en japonés)

Pero la verdadera razón por la que vine

Era porque quería encontrar un coyote

Quería aguzar la audición y escuchar su aullido

Verberando con sequedad sobre los caminos, por la oscuridad de la noche

 

 

SAITO MOKICHI

 

 


 

 

Al alejarme de la capital

de los faroles rojos de papel,

¿pensarán que salgo de paseo?

 

ADOLFO CASTAÑÓN

 

 


 

2

 

 

Como quien quita piel a un fruto

Si eres fruta

come los labios que te comen

y dibujan rombos entre dos lenguas

que se trenzan en su bóveda boca

 

Al adentrarme en ti

me abro y estrellas

al ir hacia tus brasas yelo

 

Mis ojos te oyen ulular

mientras te agito como una bandera

tiembla en su fuego:

tus dientes se hacen ojos

 

Soy polvo bailando

al compás de tu soplo

cicatriz enamorada

llaga cantarina

 

De tanto que muero muerdes

Caigo desaliento

de tanto subirte

(El placer juega

a los palos chinos)

 

Nos ahogamos uno al otro

Delfines surcando espumas

ángeles de hielo en vilo

espejismos entre rocas

riscos altaneros

 

Apenas cierro los ojos

llega tu eco quitándose

la piel como una fruta

 

Este alfabeto se escribe

y lee desde ambos lados del espejo

sus letras rasguñan instantes entredientes

No hay pausa no

Dime que ya no

 

 

 

GARY DAHER

 

 

 


El camino del fuego

[fragmentos de La senda de Samai]

 

 

 

 

TRES

 

1

Con gran caridad, Prometeo ocultó el fuego en cada hombre, uno por uno, en concavidad sagrada, y allí palpita, hermosa diosa de luz.

 

2

Como a hígado de Prometeo el tiempo, águila voraz, nos devora y nos regresa. A eso llamamos olvido.

 

3

Es muy grave ser puente e ignorar al río.

 

4

Sísifo, ¡baja ya! Deja de pujar la piedra.

 

 

 

MARIO LICÓN CABRERA

 

 

 

El hombre que se creía barco

 

1

 

Un barco dando de tumbos, atracando y zarpando

de bar en bar.

Un barco ebrio, zarandeado por mareas de whisky

                            encallado

en las turbias losas de un psiquiátrico.

Un barco ebrio, eso era

“Plantagenet”.

Un barco tambaleándose a lo largo de fríos corredores,

entre oscuras muecas y sucias enfermeras,

en el encrespado mar de los remordimientos—

en el vacío.

 

 

2

 

Fluir

fluir entre gritos

estremecimientos y delirios

Fluir

fluir mirando a través de la ventana

                           como la hierba crece

a orillas del East River, mientras

“…la vida, como el humo de las chimeneas, dice adiós…”

Fluir

entre sombras, sordas sombras y la esperanza

que se aleja en busca de la ballena blanca.

Fluir

avivando el alma

rasgando un piano “…sweet & low…”

ante una audiencia que entre asombros se pregunta:
“!!!!Esto es un hospital… o una prisión???”

 

 

3

 

Desde afuera la lluvia remueve un sentimiento:

“!!!qué viento… qué tormenta irrumpirá… y

abofeteará el pellejo del Dr. Caggart, liberando así

a… Kalowsky… a Gary… qué tormenta, qué rayo

quién mierdas lo hará???”

Plantagenet, acariciando la lluvia, piensa:

“en este mundo de indecencias e injusticias…

la salud mental no tiene sentido…”

 

 

4

 

La puerta se cierra, la calle te espera

tu naufragio continúa

por los callejones del puerto buscarás el fantasma

de Melville, pero

solo encontrarás el fantasma de Ruth

que emerge de la sombra

la sombra de tu libertad,

tu trastabillante sombra ya sin alas.

Estrellarás tu último trago de whisky

contra la manchada pared del mundo.

Estrellarás tu último barco… y así… liberarás

                          a la humanidad entera…