viernes, 15 de julio de 2022


 

BIANCAMARIA FRABOTTA

 


 

Inexorable factor

tú que nunca dices el negro

monosílabo del yo

es mi planta de pan

este frívolo idioma

de noches ajetreadas

que se cuentan, que envuelven.

Esta pálida

vulnerable semilla

que echa raíces dentro de nosotros

y de nosotros se nutre,

esta alegre

grama infecciosa.

 

De: “La planta de pan”

 

HILDA CONKLING

 

 

Pensamiento de marzo


 

Estoy esperando el regreso

de las flores:

estoy sola

pero aun puedo esperar por los pájaros.

 

Versión de Adalberto García López

 

 

 

VONANI BILA

 

 

  

En el nombre de Amandla¹

 


En el nombre de Amandla

dime qué ha cambiado en este pueblo

no hay víveres en la cocina

niños desnudos con grietas en los labios no pueden ir a la escuela

algún otro niño hambriento fue arrollado por el coche de un hombre rico

el niño nos ha dejado, el hombre rico contribuyó con un ataúd barato

todo el mundo pensó que se pudriría en la cárcel.

Es invierno, la escuela no tiene bancas, libros, ventanas

nuestros líderes mandan a sus hijos a escuelas privadas

pregúntales a ellos.

 

En el nombre de Amandla

dime qué ha cambiado en este pueblo

ese grifo está seco

carraspea aire caliente

la bomba está muerta

la abuelita no tiene efectivo para comprar diésel

camina distancias para acarrear agua sucia

del estanque inmóvil,

de la presa envenenada

donde la gente comparte el agua con los animales

la abuelita lava con una jícara roja rajada

ella compra agua y empuja una carretilla

Ella es grande, ¡70!

su cabaña colapsó durante los días de la inundación

ella sobrevivió porque estaba ocupada recolectando leña en el monte

ella espero por su pensión a los 60 años de edad

ella hace una fila empujando y arrastrando los pies

alguien de su edad colapsa bajo el asfixiante sol

ella cierra sus ojos, aspira rapé, estornuda,

escurren lágrimas en sus mejillas

ella consigue su pensión, es un cheque.

 

En el nombre de Amandla

dime qué ha cambiado en este pueblo

Magogo toma un taxi al centro

los jóvenes no quieren sentarse junto a ella

dicen que huele a orines

ella compra una lata de parafina, una cobija y un pollo

ella compra harina de maíz a cuenta

sus hijas, ahora madres, quieren su parte

el gobierno da $110 por hijo

abuelita paga a la sociedad funeraria cada mes

ella no quiere ser enterrada en una sábana

la gente no querrá venir al funeral sin una vaca en sacrificio

ella habla sola, predice la muerte en cualquier momento a partir de ahora

ella es llamada cheque por sus propias hijas

sus esposos están desempleados

ellos tejen y venden cestas, fuman BB y toman mqombhoti

ellos esperan llegar a 65 para acariciar las monedas

Magogo se lava con una jícara roja rajada

ella quiere darse un baño antes de morir

ella llama a Mandela Mondela

ella sólo vota por la ANC

¿Por qué?

 

En el nombre de Amandla

dime qué ha cambiado en este pueblo

estamos en problemas

nuestra electricidad es débil

se apaga todo cuando usas una parrilla

se detiene cuando llueve

se va volando con el viento

Viene el invierno —el municipio la cortará

Pobre hombre negro con atrasos

de regreso a mbhawula y malahla

Megogo tiene frío

duerme junto al fuego quemándole los pies

el brasero emite gas,

ella toserá coágulos de sangre

el empleado de salud en la clínica

le dará paracetamol

 

En el santo nombre de Amandla

dime qué ha cambiado en este pueblo

nuestra casa del RDP² filtra cuando llueve

no podemos adecuarnos, es un excusado

los vemos y los escuchamos haciendo el amor

en un cuarto dividido por una cortina

no puede haber ningún secreto

nosotros dormimos en la cocina

nos levantamos temprano como elefantes

Verwoerd, mi enemigo, construye casas mucho más grandes

Trevor Manuel no puede para de comprar submarinos Corvett’s y Jets de combate

nuestros impuestos pueden hacer algo mejor

la guerra está por venir

nos han dicho.

 

Versión de Roberto Amézquita

 

1.- Palabra zulú que significa «poder». De especial resonancia en la lucha social sudafricana contra el apartheid y por los derechos de la negritud en el continente africano en general. Es un importante grito de poder del pueblo contra la opresión.

2.- Programa de Reconstrucción y Desarrollo (RDP, por sus siglas en inglés). Programa de vivienda desarrollado por el Congreso Nacional Africano durante el gobierno de Nelson Mandela.

 

 

JOSÉ MANUEL OTHÓN


 

Angelus domini

 

 

I

Sobre el tranquilo lago, occiduo el día,
flota impalpable y misteriosa bruma
y a lo lejos vaguísima se esfuma
profundamente azul, la serranía.

Del cielo en la cerúlea lejanía
desfallece la luz. Tiembla la espuma
sobre las ondas de zafir, y ahúma
la chimenea gris de la alquería.

Suenan los cantos del labriego; cava
la tarda yunta el surco postrimero.
Los últimos reflejos de luz flava

en el límite brillan del potrero
y, a media voz, la golondrina acaba
su gárrulo trinar, bajo el alero.

 

 

II
Ondulante y azul, trémulo y vago,
el ángel de la noche se avecina,
del crepúsculo envuelto en la neblina
y en los vapores gráciles del lago.

Del septentrión al murmurante halago
los pliegues de su túnica divina
se extienden sobre el valle y la colina,
para librarlos del nocturno estrago.

Su voz tristezas y consuelo vierte.
Humedecen sus ojos de zafiro
auras de vida y ráfagas de muerte.

Levanta el vuelo en silencioso giro
y, al llegar a la altura, se convierte
en oración, y lágrima, y suspiro.

 

 

MARÍA VICTORIA ATENCIA

 



Epitafio para una muchacha


 

Porque te fue negado el tiempo de la dicha

tu corazón descansa tan ajeno a las rosas.

Tu sangre y carne fueron tu vestido más rico

y la tierra no supo lo firme de tu paso.

 

Aquí empieza tu siembra y acaba juntamente

-tal se entierra a un vencido al final del combate-,

donde el agua en noviembre calará tu ternura

y el ladrido de un perro tenga voz de presagio.

 

Quieta tu vida toda al tacto de la muerte,

que a las semillas puede y cercena los brotes,

te quedaste en capullo sin abrir, y ya nunca

sabrás el estallido floral de primavera.

 

 


YANG LIAN

 

  

3          Tema del espacio

 


Las innumerables cornisillas volantes de oro        se alternan con las ondas

la brisa de la superficie del agua que sopla suavemente por debajo

La habitación está aún más vacía

 

la jaula         tejida con palabras         brilla como palabras

Pabellón de agua cristalina de un verso que navega al frente

Los que están bloqueados desde dentro        aún son mis ojos

 

miran         el espacio admirable como los enfermos

continúan su crecimiento invisible         Yangzhou

en secreto que absorbe todas sus masacres

 

El color del sauce         quemado hasta el fondo del lago como un sonido

clama por ayuda         el nivel del agua juega a colinas derrotadas en la distancia

Mi turbulencia         malversa sin imaginación

 

aún así         sólo un escenario prestado

Fina en la valla desde antaño         la marca de tinta aún tiene la forma de la sangre

/rezumante

Cornisas voladoras extienden vigorosamente las ventosas         pabellón con más almas aún

 

todavía no se puede llenar                    un destello de falsa brisa bajo el agua

La patria del fantasma dejada sólo con penas de prisión sin fin

condenado hace tanto         campo de concentración de un cuerpo

 

Confinar ladrillo y madera         vieja pintura exterior         que refleja

la galaxia que confina aún más allá de esos yo

que extienden su diámetro después de la muerte

 

Mirar         una formación hecha de agua         inexistente

ondas relucientes         últimas palabras nunca más que una oración

La poesía         que sujeta con escalofríos la mala noticia en sus manos

 

 

De: “Las cornisas volantes del Pabellón de los Cuatro Puentes de la Lluvia Brumosa”

Versión de Katherine M. Hedeen y Víctor Rodríguez Núñez