"Un poema si no es una pedrada -y en la sien- es un fiambre de palabras muertas" Ramón Irigoyen
sábado, 15 de enero de 2022
JANE DURÁN
Batalla
de Teruel, Invierno 1937-1938
Yo
podría escribir sobre los libros de mi padre.
Nunca había polvo en ellos. Los tomaba entre sus manos
como si fuera la última vez. Parecían acolchados,
esperando su momento, deslizados uno por uno
hasta que formaban un muro raso – un solo libro todos ellos.
Se
desprendían en dorados, en rojos secretos
como a fumar un cigarrillo temprano por la mañana
antes de que la neblina se despejase por completo
hacia la crueldad. Podía tocar los títulos
y se volvían importantes.
En
su propia oscuridad -fronteras personales,
bordes a los que tanto se había acercado,
la colina helada sobre el valle, los soldados
asidos a sus laderas, costuras de nieve,
la España que él sostenía y que lo sostenía,
cediendo línea tras línea.
JOSÉ MÁRMOL
Al
nombre de alguna mujer
tu
cuerpo es un deseo de ti por todas partes. tu cuerpo es un imán tensado mis
rodillas. eternidad de un día desde la que borracho de urgencias me disuelvo.
fugacidad con brazos para estrecharme a un fuego. tu cuerpo es una flor
brotando de un espejo. un temor con esperma recogido en el vientre. la pelvis
una playa que agrupa un mar de besos. tu cuerpo es un recuerdo que no tiene
pasado. permanencia del agua en racimos de unas horas. tu cuerpo es la noche
con su nada redonda. el sonido. el metal. la soledad. la campana que hincha la
neblina sobre las viejas piedras de la catedral. tu cuerpo es un deseo de ti
por todo el tiempo. escasos los dedos. tremendos los ojos y unas ingles llanas
de las que crecen nubes. tu cuerpo no amanece. tu cuerpo inventa alas. azul en
lo azul. desde lo blanco blanco. voz en la voz y por el viento soplo. tu cuerpo
es un deseo de ti por todo sitio. tu cuerpo es una danza de ti si el piano
flota. tu cuerpo es un reclamo de amor en cada gesto. tu cuerpo es un deseo de
ti por todas partes.
De:
“La invención del día”
BEATRIZ RUSSO
Transparencia
lunar
Quien
vea una luna transparente que se arrodille ante la noche.
Ha
descubierto una mirilla para ver desnudarse al mundo.
Caerán
los trapos sucios de la miseria y la vida nos mostrará
su
piel humana.
ROBERTO COREA TORRES
mudanza
Habrá
que reemplazarnos,
decir:
mira,
me voy
y
sin embargo ya hay alguien
y ni
siquiera siento
ser
sustituido,
porque
me deslizo
sobre
la pátina
de
los jóvenes que llegan.
Ellos,
mis hijos,
tendrán
los suyos,
y se
volverán viejos,
y
estarán alegres de haber sido,
y
tendrán su tiempo
para
ser reemplazados,
y se
tendrán que ir,
como
yo ahora
siento
que me estoy yendo.
De:
“ahora que ha llovido”
JOAQUIN SABINA
El
oro del Perú
Aunque
convaleciente todavía,
del
eclipse de laca de Corrientes,
ya
no llevo un cuchillo entre los dientes,
te
echo menos de menos cada día.
Te
debo aún, tiro porque me tocas
los
cojones, dos tangos atorrantes;
de
tu boca aprendí que sobran bocas
dispuestas
a besar a los cantantes.
Te
felicito por el sonajero,
qué
lindo rima con ya no te quiero,
sos
la Evita Perón de la poesía.
A
propósito, hablando de tesoro,
en
el Perú las minas de oro,
en
tu vagina de bisutería.
VÍCTOR JARA
Paloma
quiero contarte
Paloma
quiero contarte
que estoy solo,
que te quiero.
Que la vida se me acaba
porque te tengo tan lejos,
palomita verte quiero.
Lloro
con cada recuerdo
a pesar que me contengo.
Lloro con rabia pa’ fuera
pero muy hondo pa’ dentro,
palomita verte quiero.
Como
tronco de nogal
como la piedra del cerro
el hombre puede ser hombre
cuando camina derecho,
palomita verte quiero.
Cómo
quitarme del alma
lo que me dejaron negro,
siempre estar vuelto hacia afuera
para cuidarse por dentro,
palomita verte quiero.
