domingo, 21 de julio de 2013

LUISA CASTRO




Inocencia


Se acabó la inocencia.
Era una bebida empalagosa y breve,
una comida exótica,
ahora ya lo sé.

La probé.

De esas cosas que se toman un día
y siempre las recuerdas,
de esa gente que te encuentras
y no vuelves a ver.

Nunca sabrás lo que pasaría
en el banco de la inocencia.
Con los pies colgando
allí sólo vive la gente que no recuerdas,
lo que nunca ha pasado.

Te sentaste un momento
a escuchar desde lejos la orquesta.
Era duro y solitario
el banco de la inocencia.
Demasiada prisa en volver
como para no olvidarte algo.

Ahora ya lo sabes,
la inocencia es esa gente
que se quedó tu chaqueta.


De "De mí haré una estatua ecuestre"  


JUAN LARREA




Verdores innatos


Amiga mía eres tierna hasta el delirio
aquí está la hierba que sube por tus piernas
qué llama ligera
puesto que en cada oreja una anémona
la tierra jamás escucha las palabras que uno quisiera
hagamos nacer mariposas suscitando inquietudes
suscitando caléndulas para huir a no importa dónde
no demasiado pero sin embargo
¿no es así?



CARLOS PELLICER




Canto destruido



¿En qué rayo de luz, amor ausente
tu ausencia se posó? Toda en mis ojos
brilla la desnudez de tu presencia.
Dúos de soledad dicen mis manos
llenas de ácidos fríos
y desgarrados horizontes.

Veo el otoño lleno de esperanza
como una atardecida primavera
en que una sola estrella
vive el cielo ambulante de la tarde.

Te amo, amor, y nada estoy diciendo
para llamarte. Siento
que me duelen los ojos de no llorar. Y veo
que tu ausencia me encuentra
como el cielo encendido
y una alegría triste de no usarla
como esos días en que nada ocurre
y está toda la casa
inútilmente iluminada.

En la destruida alcoba de tu ausencia
pisoteados crepúsculos reviven
sus harapos, morados de recuerdos.
En el alojamiento de tu ausencia
todo lo ocupo yo, clavando clavos
en las cuatro paredes de la ausencia.

Y este mundo cerrado
que se abre al interior de un bosque antiguo,
ve marchitarse el tiempo,
despolvorearse la luz, y mira a todos lados
sin encontrar el punto de partida.

Aunque vengas mañana
en tu ausencia de hoy perdí algún reino.
Tu cuerpo es el país de las caricias,
en donde yo, viajero desolado
-todo el itinerario de mis besos-
paso el otoño para no morirme,
sin conocer el valor de tu ausencia
como un diamante oculto en lo más triste.



MARIO BENEDETTI




Digamos


1.
Ayer fue yesterday
para buenos colonos
mas por fortuna nuestro
mañana no es tomorrow

2.
Tengo un mañana que es mio
y un mañana que es de todos
el mío acaba mañana
pero sobrevive el otro.




RODOLFO USIGLI



  
Miro entre dos amores dividida.

Two loves i have of confort & despair.
W.S.

Miro entre dos amores dividida
mi vida; uno de sombra, morbo y luto,
celeste infierno de cada minuto,
infernal paraíso, muerta vida.

El otro es la salud y la medida,
el aire alto, el madurado fruto
tan limpio, tan redondo y absoluto,
que surte sed, la sacia y la convida,

de las dos, una mujer es la diosa.
La otra un seráfico demonio:
sufre en mi goce y en mi llanto goza.

Y así, en estas primicias de mi otoño,
mi bien es el pecado que me acosa
y es mi mal consagrado matrimonio.




CARLA VALDÉS DEL RÍO




Ero-Fragmentos
(Selección)


Nuestros signos sudan,
cuando el poema enciende
las balanzas de la noche.