viernes, 16 de octubre de 2020

MAURICE MAETERLINCK



 

Canción



Ellos me anunciaron,
(Hijo, tengo miedo),
Ellos me anunciaron
Que él iba a partir...

Mi luz encendí,
(Hijo, tengo miedo),
Mi luz encendí,
Y me aproximé. ..

En la primer puerta,
(Hijo, tengo miedo),
En la primer puerta
La llama tembló...

Luego, en la segunda,
( Hijo, tengo miedo )
Luego, en la segunda,
La llama me habló...

En la tercer puerta
(Hijo, tengo miedo)
En la tercer puerta
La luz se apagó.


Versión de Edmundo Bianchi

 

 

BOB DYLAN

  

 

 

Hace mucho tiempo, muy lejos... 



Predicar sobre la paz y la hermandad 
¡Oh!, ¡cuál puede llegar a ser el precio! 
Un hombre lo hizo hace ya mucho tiempo 
y le colgaron de una cruz. 

Hace mucho tiempo, muy lejos, 
Estas cosas ya no pasan hoy en día. 

Las cadenas de esclavos 
Se arrastraban por el suelo 
Con las cabezas y los corazones agachados 
Pero esto fue en tiempos de Lincoln 
Y eso fue hace mucho tiempo. 

Hace mucho tiempo, muy lejos 
Cosas como ésta ya no pasan hoy en día. 

Las armas de guerra se dispararon salvajemente 
El mundo entero sangró 
Los cuerpos de los hombres flotaron en las orillas 
De océanos de barro. 

Hace mucho tiempo, muy lejos, 
Cosas como ésta ya no pasan hoy en día. 

Un hombre tenía mucho dinero 
Otro no tenía ni para comer 
Un hombre vivía como un rey 
El otro mendigaba en la calle 

Hace mucho tiempo, muy lejos 
Estas cosas ya no pasan hoy en día. 

Un hombre murió por un cuchillo muy afilado 
Un hombre murió por la bala de un rifle 
Un hombre murió de tristeza 
Al ver el linchamiento de su hijo 

Hace mucho tiempo, muy lejos 
Cosas como ésta ya no pasan hoy en día. 

Los gladiadores se mataban los unos a los otros 
Esto fue en tiempos de los romanos 
La gente les vitoreaba con los ojos inyectados en sangre 
Mientras los ojos y la mente se cegaban 

Hace mucho tiempo, muy lejos 
Cosas como ésta ya no pasan hoy en día. 

Y hablar de paz y hermandad 
¡Cuál puede llegar a ser el precio! 
Un hombre lo hizo hace mucho tiempo 
y le colgaron de una cruz. 

Hace mucho tiempo, muy lejos 
Cosas como ésta ya no pasan hoy en día. ¿No?

 


Versión de Antonio Rasines



JOHANNA CARVAJAL

  


 

Ganga

 


 

Una joven es río

además de ser isla,

regresa a las orillas

para enajenarse de sí…

Se baña desnuda

entre lotos

esperando la tempestad…

Las aguas corren

con el abandono

ansiando ser naufragio.

 

 

 

JOHN DONNE

  

 


Constancia de mujer

 



Un día entero me has amado.
Mañana, al marchar, ¿qué me dirás?
¿Adelantarás la fecha de algún voto recién hecho?
               ¿O dirás que ya
no somos los mismos que antes éramos? 
¿O que de promesas hechas por temor reverente
del amor y su ira, cualquiera puede abjurar?
¿O que, como por la muerte se disuelven matrimonios verdaderos,
así los contratos de amantes, a imagen de los primeros,
atan sólo hasta que el sueño, imagen de la muerte, los desata? 
¿O es que para justificar tus propios fines
por haber procurado falsedad y mudanza, tú
no conoces sino falsedad para llegar a la verdad?
Lunática vana, contra estos subterfugios podría yo
                argumentar, ganando, si lo hiciera.
                Pero me abstengo,
porque mañana puede que yo así también piense.

 

Versión de Purificación Ribes

 

LUIS ANTONIO DE VILLENA



 

Celebración mediterránea





Dicen los maldicientes: ¡Qué poco le queda a Miguelito!
Fue rey -como tantos- de unas horas: Cinco o seis primaveras.
Poca cosa. El tiempo se lo lleva. ¿Quién recordará su edad maravillosa?

También yo tuve envidia de tu belleza pura. Y de tu alegre vida,
sobre todo, negada a la tragedia. Favorita del dios. Sin angustia ni sombra.
¡Qué hermoso verte riendo por las noches! Sábado o lunes: la vida es
                                                                          perfecta.

Yo en ti pensé mi vida coronada. Pero un símbolo no vale a la vida.
Te imaginé en amor, en dicha, en compañía. Curándome
                                                        la soledad inhabitada.

¡Qué vano fui! Tu corazón no tiene corazón. Eres el sol radiante a
                                                                         mediodía.

No hagas caso de las malas lenguas. Tú eres solo presente,
sólo ahora. El tiempo en tu sonrisa se va por la cloaca.
Cuando sea viejo
de intención ya lo soy- pensaré en ti: Minuto de luz divina, entre la nada.



VLADIMIR MAÏACOVSKI

  

 

 

Barato se liquida

 

 

A ti, mujer,
a quien enredo en conmovedora aventura,
o a ti, transeúnte, a quien miro simplemente.
Todos pasan temerosos apretando los bolsillos.
¡Ridículos!
¡A los pobres,
qué pueden robarles!
Pasarán los años
lo sabrán ustedes,
tal vez, yo,
candidato a dos metros de la morgue municipal,
soy infinitamente más rico, 
que cualquier Pierpont Morgan.
Al cabo de tantos y tantos años,
ya no viviré,
moriré de hambre,
o un tiro me pegaré
a mí,
al de fuego,
me estudiarán los profesores,
hasta los puntos y las comas,
y hablarán de dónde y cómo,
y cuándo vivió y nació...
Y desde la cátedra,
un idiota de frente saliente,
recordará a Dios o al demonio.
Se inclinará la muchedumbre,
adorándome inquieta,
y no me reconocerán.
Yo no soy yo.
Dibujarán una cabeza,
con cuerpo o con aureola,
y todas las estudiantes,
antes de dormirse,
soñarán acostadas sobre mis versos.
Soy pesimista -dicen-
¡Ya lo sé!
¡Siempre habrá aprendices en la tierra!
Pero al fin,
escuchádme:
todo lo que posee mi alma,
todo,
¿a ver quién se atreve a medir esta hondura?
Toda la maravilla,
que en la eternidad adornará mi paso,
y aún mi propia inmortalidad,
que tronando por todos los siglos,
juntará a mis admiradores de rodillas,
en el mundo y siempre,
¿todo eso quieren?
lo doy enseguida,
por una sola palabra,
cariñosa,
humana.
¡Gente!
¡Venid, levantando polvo por las avenidas,
aplastando cuerpos, pisando rostros!
Venid de toda la tierra.
hoy,
en San Petersburgo,
en la calle Nadiézda¹
por menos de un kopek²
se liquida una valiosísima corona,
por una palabra humana.
¿Barato, verdad?
¡Anda,
prueba encontrarla!

 

 

1.- Calle donde vivió Mayakovski
2.- Moneda rusa que equivalía a un céntimo

 

Versión de Lila Guerrero