jueves, 7 de octubre de 2021


 

LUIS VIDALES

 


 

El hueco

 

 

Mis versos dicen.
Hueco
único sitio habitable.
Casas.
Casas.
Casas.
Huecos interrumpidos por paredes y puertas.
Huecos divididos en cuadros.
Mi vida
mi vida transeúnte
está llena de las troneras
de las horribles cavernas
que las casas les hacen a los huecos.
Y ya no puedo
borrar en mí la sensación
de los huecos de la ciudad
encerrados en los cajones de los cuartos.

 

De: “Suenan timbres”

 

ANTONIO ENRIQUE

 


 

Más allá del humo, del mundo y de la nada

 

 

Lo que yo amo de ti
son tus huesos.
Es tu cuerpo y lo más interno
de tu cuerpo,
Allí donde nace tu saliva,
tu sangre, la luz con que miras
el mundo, la vida y hasta mí mismo.
Lo que yo amo de ti
son tus ojos
porque en ellos me miras,
son tus manos
porque me tocas,
es tu boca con la que me nombras.
Lo que yo amo de ti
es el vértigo de que te estás
muriendo,
la pobreza de no quedarnos nada.
Lo que yo amo de ti
es la noche, el día
y la tarde.
Lo que amo de ti es el gemido,
el miedo y la tristeza.
Lo que amo de ti son tus ojos enfermos,
y es tu sangre, y son tus huesos
porque tú y yo vamos a morir,
pero tus huesos y los míos
arderán en el mismo fuego,
seguirán amándose
y propagándose
más allá del humo y del mundo
y de la nada.

  

De: “La palabra muda”

 

 

MARTA LÓPEZ VILAR

   

 

El almendro

 


Solo este árbol sabe,ve en su resina

la dulce voz de cada atardecer.

Cuando era él era mi casa.

conocía los nombres que eran míos.

Todo el tiempo indemne, 

sagrada memoria de la que nadie se marchaba.

 

De: “En las aguas de octubre”

 

 

PABLO GARCÍA CASADO

 


 

Milf

 

Ha tenido que dejar al niño con la suegra. La mayor está en el instituto y la recoge su padre. Cuando vuelva tiene que hacer un trabajo con cartulinas. Tengo que comprar pegamento, ¿tú sabes de un sitio, aquí, en el polígono? Le van a dar las tantas. Mi suegra, la pobre, no sabe. Nos han dicho que sería algo rápido, pero todavía estamos esperando a que limpien. Yo si no limpian no entro, se lo he dicho a Javi. Conchi tiene prisa, dice que le da igual. Ponte un poco de esto. Y repásate los morros.



UNAI VELASCO

 

  

 

Que somos buenos

Para Jade, que trajo los ciervos

también las fieras salvajes

SALMO 8

 

 

Tengo miedo de las avispas

tengo miedo amarilla ictericia amarilla

hueso de pollo alojado en la garganta de las bestias

alojadas en la garganta.


Caballos blancos cinchas azules ¿qué has de temer?

de cincha amarilla y caballo ictericia temes

las patas otorgadas de los ciervos

que duermen sobre las hojas.

                                         Detente y escucha.

Mientes cristal venido abajo.


No no tendré no tengo miedo soy bueno y observé

ciervos blancos ciervos traducidos de sol

contra mi ventana.


Mientes cristal venido abajo vienen a tu portal

por la mañana.


No temo al temor temo al portal

temo tu anillo negro de los malhumores

los camellos de adoración despacio

su camino incierto soy muy bueno

tengo el control sobre mi cuerpo y no temo que nada temo

no temo amarilla ictericia. Que somos buenos.

.                                                                   Detente y escucha.

Caballos blancos de pezuñas buenas ofrecidas

no tengas miedo de los ciervos de tendida pezuña hendida

y ligera

            en su lugar

tendido azul abierto manillar del pecho ¿quién oye el

zumbar? también hizo a las fieras salvajes las avispas

el amarillo pollo entretenido hizo tu garganta

zumbaran porque enmendamos el temor                                                                                                       aquí

porque nos da la gana zumbaran alejándose de rica miel

zumbando y sin miedo sin miedo tu voz arrebatada hollada

ligeramente habla.


Quiero hablar quiero decirte que no deseo que a nada aspiro

que no temeré no temo a la avispa ictericia pero

tengo un hueso de pollo alojado en la garganta

tarasca de dientes por contar cervatillos blancos.                                                                                                       Yo tengo

el anillo azul de la ataraxia

somos buenos sabemos que

somos buenos que las avispas miden de un centímetro a

centímetro y medio amarillo punzón blanco de ciervo

que duerme en la ventana mentira

que duerme en los árboles y baja de día al portal.


Tengo miedo del miedo de las avispas del miedo de los ciervos

no dejes

no que somos buenos que ofrecemos nuestro cuerpo

en pira de bondad detente

y escucha sobre todo escucha y que así sea y que así

                                                                         sea.

 

De: “El silencio de las bestias”

 

MARIANO PEYROU

 


 

Los recuerdos

 

 

Los brillos empañados cada vez más abajo,
una voz que no dice nada en distintos idiomas,
algunos de los que no viajan conmigo tienen miedo
(yo sigo teniendo once y patino por El Retiro seguro
y verde),
otros se entretienen jugando a la indiferencia.
Pronto estaremos solos.
Alguna de esas luces fue mi casa.

  

De: “El mar hospital es el mar aeropuerto”