"Un poema si no es una pedrada -y en la sien- es un fiambre de palabras muertas" Ramón Irigoyen
jueves, 2 de enero de 2020
EDGAR LEE MASTERS
John Wasson
¡Oh!
pasto cubierto de rocío, pasto de las praderas
carolinenses,
pasto por el cual me siguió Rebecca, llorando, lloraba
el niño en sus brazos, lloraban los tres que la seguían,
todos lloraban,
alargando el adiós. Me fui a la guerra contra los ingleses,
y vinieron años largos y duros hasta el día deYorktown
y la búsqueda de Rebecca.
La encontré, por fin, en el estado de Virginia,
dos hijos habían muerto.
Viajamos en buey hasta Tennessee,
al cabo de unos años llegamos a Illinois
y finalmente aquí a Spoon River.
Cortamos el pasto búfalo,
abrimos los bosques,
construimos las escuelas, los puentes,
hicimos los caminos y cultivamos la tierra,
solos con nuestra pobreza, las plagas, la muerte...
Si Harry Wilmans, quien contra los filipinos peleó,
ha de tener en su tumba una bandera,
¡yo le doy la mía!
carolinenses,
pasto por el cual me siguió Rebecca, llorando, lloraba
el niño en sus brazos, lloraban los tres que la seguían,
todos lloraban,
alargando el adiós. Me fui a la guerra contra los ingleses,
y vinieron años largos y duros hasta el día deYorktown
y la búsqueda de Rebecca.
La encontré, por fin, en el estado de Virginia,
dos hijos habían muerto.
Viajamos en buey hasta Tennessee,
al cabo de unos años llegamos a Illinois
y finalmente aquí a Spoon River.
Cortamos el pasto búfalo,
abrimos los bosques,
construimos las escuelas, los puentes,
hicimos los caminos y cultivamos la tierra,
solos con nuestra pobreza, las plagas, la muerte...
Si Harry Wilmans, quien contra los filipinos peleó,
ha de tener en su tumba una bandera,
¡yo le doy la mía!
LUCILA NOGUEIRA
Navidad en Montparnasse
La
enorme luna oval se derrama en nuestra cabeza
Mañana
oscura en una voluntad oscura
No
sé por qué motivo entramos sin motivo
Es
esa tela gigante de Salvador Dalí
Yo
y usted vacíos en ese tren que nos paraliza
En
relieve los cigarros retorcidos
Por
favor haga alguna cosa
Congele
nuestra imagen con el control remoto
Es
una pena que este film termine
Pero
usted duerme en silencio en el vagón de al lado
Y
una copa de vino no mancha de sangre el valle del Loire
Vidrio
empañado paisaje corredizo e impreciso
Ésta
es la hora en la que yo podría quedarme
No
tengo e-mail y no respondo cartas
Y
un tren completamente inmóvil distancia
Las
canciones de navidad en Montparnasse
GEORG TRAKL
Grodek
Por
la tarde resuenan los bosques otoñales
Sus
armas de muerte, las llanuras doradas
Y
lagos azules, arriba el sol
Sombríamente
rueda; la noche abraza
A
los guerreros agonizantes, el lamento salvaje
De
sus bocas destrozadas.
Y
nubes rojas quietas se reúnen
En
la pradera donde habita un iracundo Dios,
La
sangre derramada, frescura de luna;
Todas
las calles van a dar a la negra putrefacción.
Bajo
la enramada de oro de noche y estrellas, vaga
La
sombra de mi hermana por la apacible floresta
Para
saludar a los espíritus heroicos, las cabezas
sangrantes;
Y
suaves suenan entre los juncos las flautas oscuras
del
otoño.
¡Oh
pena, la más orgullosa! Oigan ustedes, altares de
bronce,
La
ardiente llama del espíritu nutre un dolor más
violento,
Los
nietos nonatos.
PEDRO GANDIA
Patientia
...y sabes que en cualquier
momento de esta noche
cerrar pueden tus manos
el libro de la vida
aunque te quede tanto
por leer. Vida y muerte
son la misma confusa,
fugitiva sustancia.
La risa de Epicuro
resuena en el vacío.
El brillo de algún ídolo
sea tu último engaño.
De: "Acrópolis"
...y sabes que en cualquier
momento de esta noche
cerrar pueden tus manos
el libro de la vida
aunque te quede tanto
por leer. Vida y muerte
son la misma confusa,
fugitiva sustancia.
La risa de Epicuro
resuena en el vacío.
El brillo de algún ídolo
sea tu último engaño.
De: "Acrópolis"
YANKO GONZÁLEZ
[u. zürn]
Al
llegar a casa, la ropa que uno cuelga
Puede
escuchar tus canciones
Si
uno sabe ordenarla
Porque
una pequeña parte de lo que fuiste
En
el día, ahora flota libre
Bajo
una bufanda
Has
llegado a casa y desplegadas
Ya
pueden oírte tu camisa
Tu
abrigo, una falda
Entonces,
entonas una melodía
Una
estrofa suelta que hace falta
Para
saber cómo te arrojarás de ti
Mañana
PAOLA R. SENSEVE T
2
vengo
a Casa
al
cuerpo de mi abuela
que
levita sobre sábanas suaves
parece
que el techo
es
lo único que impide que
pase
algo que
solo
ella quiere
me
pide que le pinte las uñas que
le
depile las cejas dice que
siempre
es mejor una vieja arreglada que
una
vieja desarreglada
lo
hago y de repente
su
cuerpo liviano
adquiere
peso
Suscribirse a:
Entradas (Atom)