jueves, 22 de enero de 2015

SOR JUANA INÉS DE LA CRUZ


 

- IX -

 

Que contiene una fantasía contenta con amor decente

 
Detente, sombra de mi bien esquivo,
imagen del hechizo que más quiero,
bella ilusión por quien alegre muero,
dulce ficción por quien penosa vivo.

Si el imán de tus gracias, atractivo,
sirve mi pecho de obediente acero,
¿para qué me enamoras lisonjero
si has de burlarme luego fugitivo?

Mas blasonar no puedes, satisfecho,
de que triunfa de mí tu tiranía:
que aunque dejas burlado el lazo estrecho

que tu forma fantástica ceñía,
poco importa burlar brazos y pechos
si te labra prisión mi fantasía.

 

 

TOMÁS DE IRIARTE


 

Fresca arboleda del jardín sombrío

 

 ¡Fresca arboleda del jardín sombrío,  
 clara fuente, sonoras avecillas,  
 verde prado que esmaltas las orillas  
 del celebrado y anchuroso río!  

 ¡Grata aurora que viertes el rocío 
 por entre nubes rojas y amarillas,  
 bello horizonte de lejanas villas,  
 aura blanca, que templas el estío!  

 ¡Oh soledad!, quien puede te posea;  
 que yo gozara en tu apacible seno 
 el placer que otros ánimos recrea,  

 si tu silencio y tu retiro ameno  
 más viva no ofrecieran a mi idea  
 la imagen de la ingrata por quien peno.  

 

 

ALFONSINA STORNI


 
Canción de la mujer astuta

 
Cada rítmica luna que pasa soy llamada,
por los números graves de Dios, a dar mi vida
en otra vida: mezcla de tinta azul teñida;
la misma extraña mezcla con que ha sido amasada.

Y a través de mi carne, miserable y cansada,
filtra un cálido viento de tierra prometida,
y bebe, dulce aroma, mi nariz dilatada
a la selva exultante y a la rama nutrida.

Un engañoso canto de sirena me cantas,
¡naturaleza astuta! Me atraes y me encantas
para cargarme luego de alguna humana fruta.

Engaño por engaño: mi belleza se esquiva
al llamado solemne; de esta fiebre viva,
algún amor estéril y de paso, disfruta.

 

DELMIRA AGUSTINI


 

 Añoranza

 

 Íbamos en la tarde que caía
 rápidamente sobre los caminos.
 Su belleza, algo exótica, ponía
 aspavientos en ojos campesinos.

 -Gozaremos el libro- me decía
 de tus epigramáticos y finos
 versos. En el crepúsculo moría
 un desfile de pájaros marinos...

 Debajo de nosotros, la espesura
 aprisionaba en forma de herradura
 la población. Y de un charco amarillo

 surgió la luna de color de argento,
 y a lo lejos, con un recogimiento
 sentimental, lloraba un caramillo...

 

LUIS DE GONGORA

 

A un sueño

 

Varia imaginación que, en mil intentos,
a pesar gastas de tu triste dueño
la dulce munición del blando sueño,
alimentando vanos pensamientos,

pues traes los espíritus atentos
sólo a representarme el grave ceño
del rostro dulcemente zahareño
(gloriosa suspensión de mis tormentos),

el sueño (autor de representaciones),
en su teatro, sobre el viento armado,
sombras suele vestir de bulto bello.

Síguelo; mostraráte el rostro amado,
y engañarán un rato tus pasiones
dos bienes, que serán dormir y vello.

 

 

CLAUDIA LARS

 


Sonetos del Arcángel (IV)

 

Se alza mi corazón... rosa de vida,
con musical fragancia y miel de aurora,
y es una dulce y nueva flor cantora
en el rosal eterno suspendida.

Río del ansia copia y enamora
su soledad vibrante y conmovida,
mas para ser tu rosa preferida
es intocada rosa trepadora.

La envuelve lo celeste, sólo sabe
de la pureza que en el aire cabe
y de tu clara y alta perfección.

Y en un tallo invisible se levanta
hasta la suave curva de tu planta
la rosa de mi absorto corazón.