"Un poema si no es una pedrada -y en la sien- es un fiambre de palabras muertas" Ramón Irigoyen
sábado, 24 de noviembre de 2012
CONSTANTINO KAVAFIS
Vuelve
Vuelve
a menudo y tómame,
amada sensación, vuelve y tómame -
cuando del cuerpo la memoria se despierta,
y un antiguo deseo vuelve a pasar por la sangre;
cuando los labios y la piel recuerdan
y las manos sienten como que tocan otra vez.
Vuelve a menudo y tómame en la noche,
cuando los labios y la piel recuerdan...
amada sensación, vuelve y tómame -
cuando del cuerpo la memoria se despierta,
y un antiguo deseo vuelve a pasar por la sangre;
cuando los labios y la piel recuerdan
y las manos sienten como que tocan otra vez.
Vuelve a menudo y tómame en la noche,
cuando los labios y la piel recuerdan...
CARLOS PUJOL
Conversar
con los árboles...
Conversar
con los árboles
termina siendo una necesidad
para saber un poco más del hombre.
Cuando murmuran sus palabras rotas
deshechas en el viento,
aunque su lengua vegetal encierre
más secreto que comunicación,
hay que prestar oídos.
Y hablarles quedamente en español,
en el parque cuando la luz se va
con la sobria elegancia
de un lento y desdeñoso atardecer.
termina siendo una necesidad
para saber un poco más del hombre.
Cuando murmuran sus palabras rotas
deshechas en el viento,
aunque su lengua vegetal encierre
más secreto que comunicación,
hay que prestar oídos.
Y hablarles quedamente en español,
en el parque cuando la luz se va
con la sobria elegancia
de un lento y desdeñoso atardecer.
OSCAR GARCÍA
Tu
piel
Tu
piel
la
noche tibia
la
lluvia bendita
que
no para nunca
la
oscuridad
que
te acaricia
despacito
con
ternura
IVÁN GONZÁLEZ
Hay
labios
Hay
labios
pintados
en los maniquíes
hay
zumbidos
de
abeja en los comedores
hay
tarjetas
que
compran a plazos la vida
hay
pasos
que
no se detienen en ninguna vitrina
hay
sueños
que
ven desde afuera cómo ríe la gente
hay
miradas
que
bajan miradas que suben y rostros
esquivos
hay
la mar
de
cosas que caben en muy pocos bolsillos
hay
silencios
que
duelen en los corazones
hay
esperanzas
chiquitas
jugando en el parque
y
hay te quieros
que
buscan te quieros
y
almas
que
vagan desnudas sin hallar abrigo
y
dos
que
se toman las manos sin miedos
dos
que son todo en su mundo
RAFAEL ALBERTI
La
niña que se va al mar
¡Qué
blanca lleva la falda
la
niña que se va al mar!
¡Ay
niña, no te la manche
la
tinta del calamar!
¡Qué
blancas tus manos, niña,
que
te vas sin suspirar!
ERNESTO CARDENAL
10.
Cuando
los dorados corteses florecieron
nosotros dos estábamos enamorados.
Todavía tienen flores los corteses
y nosotros ya somos dos extraños.
nosotros dos estábamos enamorados.
Todavía tienen flores los corteses
y nosotros ya somos dos extraños.
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