martes, 30 de septiembre de 2025

WINSTON CHURCHILL, FRANKLIN D. ROOSEVELT Y JOSE STALIN


 

SARAI CAVERO PACCO

  

 

7. Chispa y cenizas

 


Soy fuego.

Soy chispa, la ceniza,

calor y color, trazo líneas y no

límites.

 

Suelo quemar:

troncos en pedazos, los llantos,

miedos,

sudor, recuerdos, ciego los ojos.

 

Podría quemar pastizales verdes,

frescos, secos, amargos.

 

¿Mi rebote está molesto?

 

Porque soy luz,

bailo, danzo con el viento,

al compás de las risas,

chispeo aún más.

 

Soy trazos de luz,

ilumino pupilas, sonrisas.

Doy calor, color, luz.

Acobijo el frío, las heladas,

las heridas marcadas.

 

Pero se alejan cuando chispeo

fuerte,

y regresan los perros,

al sentir sus uñas frías.

 

Ayy! Mi rebote no ha regresado.

 

Enciendo velas, las mantengo,

suelo estar para dar de comer,

tengo afecto de madre y de novia,

o se cansan de mí o se

acostumbran.

 

Casi nadie se arrepiente,

no he recibido disculpas,

a veces recibía migajas de

troncos.

 

¿mi rebote dónde se habrá

quedado?

 

Soy luz, calor, color, chispa,

ceniza,

el rebote dice que traza límites.

buscando luz.

 

Mi rebote me ha reemplazado.

 

Las heladas,

son muy heladas,

El rebote había sido ajeno.

 

Resultó ser otro perro

pero ya le corté las uñas.

 

 

EMMA VAMARÍ

 

 

 

Parecen máquinas

 


Las vieron subordinadas al frío

que el cielo no se llevó

Veo a mi abuelo con todos sus difuntos

a toda prisa en esas parábolas

Lo veo corriendo hacia mí

con asombro crudo tapándole la boca

pero no la voz

pero no lo marcial

y juntos removemos el espacio del tiempo

y solo quedan los autómatas

destrozando los cimientos del mundo

porque también les cayó el monte encima

y no queremos saber de un Dios sin demonios

Mi abuelo es un niño que llora

porque no quiere que me muera

Sus lágrimas también son paleadas hacia la calle

se cuelan por todos los rincones del minuto

y se hacen bolita en el regazo del conticinio

Veo que ese tipo de casas guardan todo

Veo a mi abuelo arrumbado en una esquina

No tarda en llegar el ejército

por nuestra tristeza

 

 

 

FABIÁN GUERRERO OBANDO

 

 

 

II

 

El consuelo de la palabra tiempo

 

 

El consuelo de la palabra tiempo.

Ni encono

Ni infortunio

Tampoco nostalgia

O remoloneo:

Consuelo.

 

Como si al fin

Me hubiese extinguido

Con tu mano

Oculta

En mi corazón.

 

 

De: “Tardía calma”

 

 

JAIME SÁNCHEZ MARÍN

 

  

El imperio de las luces (obra inconclusa), 1967

 

 

a plena luz detrás un momento de otra sombra

los postigos a medio abrir de la noche

incubando una pequeña bruma

para dejar el país de luces secas

escuchando la agitación de los pomos

relucían bosques blancos

como recogidos en sí mismos

como recogidos en nosotros mismos

no buscábamos aquella vida

la blancura de su cabecita recién amasada

sobre un decorado

donde nunca estuvo nadie para desgastarnos

una mañana a plena luz detrás otra sombra

un momento cayó

de los nuestros



De: “Magritte”

 

 

NAIM FRASHËRI

 

 

Esperanza

 

 

Tengo esperanza

que Dios un día

no deje Albania

languidecida,

ha de brillar,

y germinar.

Llegará el día

que nos dispense

un gran destello

para que engendre:

civilidad,

prosperidad.

Fraternidad,

también unión

y humanidad,

la salvación,

¡Oh de quien vea

qu’ ese día llega!

Cuando sea Albania

iluminada,

y la vesania

sea desterrada.

¡Ea, verdad,

despierta ya!

Y para Albania

la buena nueva

vendrá enseguida,

¡fuera tinieblas!

¡Oh quien consiga

ver cómo reina!

Que el albanés

junto a su lengua

son uña y carne

de Albania entera.

¡Oh de quien vea

que pronto llega!

Porque sapiencia,

prosperidad,

benevolencia

y humanidad

afluirán

sin más tardar.

 

Versión de María Roces González

 

JAVIER CLAURE COVARRUBIAS

 

  

He pedido perdón

 

 

He pedido perdón

a las madres y a las tumbas

por haber cortado el sacrificio

de las plantas para alzarse

por haber colgado en los puentes

la esterilidad intelectual de los gobiernos

y mensajes apocalípticos

sacados de cajas negras.

He pedido perdón

por no haber depositado

mil toneladas de plomo

para cortar el paso

de la locura galopante

en las mentes malvadas del globo terráqueo

también he pedido perdón

a los dioses del Olimpo

por haber amputado las extremidades

a los santos

en las capillas de los cementerios

y por haber destruido los números primos

que anunciaban la felicidad de los lagartos.

He pedido perdón

a todos y a todas que confiaron en mí

porque no pude frenar

a generales que forzaban

los cimientos de la democracia

hacia un calvario sin salida.

He pedido perdón

a las raíces que nutren los tallos

porque mis versos no llevaron

cántaros de agua a los sembradíos

no consiguieron la solidaridad

ni calmaron la furia de los mares.

No he pedido perdón

a las monjas y a los curas

porque no creo en el perdón bíblico

creo en la justicia

como el perdón del pecado.

  

De: “¿De qué espejo está hecha la vida?”