"Un poema si no es una pedrada -y en la sien- es un fiambre de palabras muertas" Ramón Irigoyen
martes, 19 de enero de 2016
DARIL FORTIS
Diálogo
del pensamiento
Dentro.
La
cualidad aromática hace de ellos expansores indetenibles,
estiran
los cuerpos, los rompen.
Nos
duelen los pensamientos,
porque
se meten en los intersticios.
Entre.
Y. Entre.
Ahí
donde el espacio es libre, dueño de sus campos.
ARMANDO ROMERO
Alquimia
del fuego inútil
En el
horno de piedra
donde
el fuego brota
hay
silencio.
Las
figuras que surgen
tienen
el idioma universal
del
fuego y de la piedra.
Cambian
sus palabras como gritos de colores.
Aman
y desaparecen
a
primera vista.
Crean
y destruyen
al
aleteo de los ojos.
Nunca
se encuentra dos veces la misma forma.
En el
fuego,
en el
silencio,
en la
piedra,
hay
algo que llamea
que
no es el fuego,
hay
algo que canta
que
no es el silencio,
hay
algo que se endurece
que
no es la piedra
GLORIA SANDIRA CASTRO SALAZAR
Edén
caduco
La renuncia,
la remembranza,
el aullido de un degustado almacenamiento de nada,
podrido,
alborotado,
caliente miembro desbaratándose en mi interior,
se retuerce,
se erecta ante el palpar de mí no estimulación consiente;
un bebe que chilla y chilla y yo lo apuñalo,
pero no es un bebe,
es solo la muñeca carbonizada de mi añorante infancia;
la navaja en mi ingle me necesita una vez más,
borbotones de sangre,
de hiel,
de semen tibio y miembros cercenados;
¡dame más!
Alcanza esa costilla a mi mano y te mostrare como se crea la vida,
la putrefacta vida,
ese perro carroñero de mi encrucijada,
¡y que caigan los cruzados del cielo!,
traicionados por el rey pedófilo de su comarca,
que viola niñas,
que mata hombres y se come a sus mujeres,
un testículo menos dirá el,
una vagina más a mi gourmet;
los brotes siguen cayendo y el público aplaude,
quieren más,
esta diversión perversa lo embriaga,
lo llena de luces con sombras fornicantes
y sonidos vociferantes de una penetración que lo llama;
Pero ya es demasiado tarde para mí,
estoy cansada,
necesito un espacio sin colores alucinantes
y cuerpos pestilentes,
el olor a sexo me ha impregnado hasta el alma,
mi himen caduco necesita un poco de agua fresca,
y aunque nunca florecerá,
de vez en cuando es bueno fertilizarlo con tierra nueva y húmeda,
y no solo con rancios penes.
LETICIA CARRERA L.
Arena
La
cama es arena y eso lo sé.
Que
acostarse con alguien, no importa,
porque
las huellas que dejamos se borran;
Podemos
culpar al viento o al mar por ellas,
negar
que estuvimos ahí, acostados, cuerpo a cuerpo.
La
cama es arena y tu cuerpo lo sabe.
MARIO RIVERO
La
calle
Esta
calle mi calle
se
parece a todas las calles de mundo
uno
no se explica por qué
suceden
tantas cosas en un minuto
en un
hora en doce horas
desde
que el sol preña la tierra
Tiene
puertas como bocas sin dientes
Las
mujeres se asoman a las ventanas
y
miran tan lejanamente…
Sobre
un alambre en el que los días
hacen
equilibrio cuelgan a secar
medias
camisas y pantalones rotos
Tres
mujeres con cara de pocos amigos
esperan
el bus. Son modistillas
que
van a los talleres de la ciudad
a
coser su miseria con una aguja de oro
La
beata de enfrente
acaricia
con uvas a un gato lustroso
y le
dice “my darling”
mientras
un estudiante regresa
a su
cuarto de hotel
donde
la cama en actitud de mujer pariendo
espera
su saco de huesos
y
colgado en la pared con una cinta
el
retrato de la novia
que
se ahorcó en sus trenzas
y ya
tiene dos hijos parecidos
a su
marido el boticario
Al
final de la calle está la casa
del
farolito rojo
a
donde van prostitutas niñas
con
pelo color de miel
y
senos como dos monedas de centavo frías
Esta
calle mi calle
se
parece a todas las calles del mundo
se
ven estas cosas y otras cosas…
YOLANDA CASTAÑO
Historia
de la transformación
Fue
primero un trastorno
una
lesiva abstinencia de niña éramos pobres y no tenía ni aquello
raquítica
de mí depauperada antes de yo amargor carente una
parábola
de complejos un síndrome un fantasma
(Aciago
a partes iguales echarlo en falta o lamentarlo)
Arrecife
de sombra que rompe mis collares.
Fue
primero una branquia evasiva que
no me
quiso hacer feliz tocándome con su soplo
soy
la cara más común del patio del colegio
el
rostro insustancial que nada en nada siembra
lo
tienes o no lo tienes renuncia acostúmbrate traga eso
cuervos
toldando nubes una condena de frío eterno
una
paciente galerna una privada privación
(niña
de colegio de monjas que fui salen todas
anoréxicas
o lesbianas la
letra
entra con sangre en los codos en las cabezas en las
conciencias
o en los coños).
Cerré
los ojos y empecé a desear con todas mis fuerzas
lograr
de una vez por todas convertirme en la que era.
Pero
la belleza corrompe. La belleza corrompe.
Arrecife
de sombra que gasta mis collares.
Vence
la madrugada y la garganta contiene un presagio.
¡Pobre
bobita!, te obsesionaste con cubrir con cruces en vez de
con
su contenido.
Fue
un lento y vertiginoso brotar de flores en invierno
Los
ríos saltaban hacia atrás y se resolvían en cataratas rosas
lamparillas
y caracoles me nacieron en los cabellos
La
sonrisa de mis pechos dio combustible a los aeroplanos
La
belleza corrompe
La
belleza corrompe
La
tersura de mi vientre escoltaba a la primavera
se
desbordaron las caracolas en mis manos tan menudas
mi
más alto halago pellizcó mi ventrículo
y ya
no supe qué hacer con tanta luz en tanta sombra.
Me
dijeron: “tu propia arma será tu propio castigo”
me
escupieron en la cara todas mis propias virtudes en este
club
no admitimos a chicas con los labios pintados de rojo
un
maremoto sucio una usura de perversión que
no
puede tener que ver con mi máscara de pestañas los
ratones
subieron a mi cuarto ensuciaron los cajones de ropa blanca
litros
de ferralla alquitrán acecho a escondidas litros
de
control litros de difamadores kilos de suspicacias levantadas
sólo
con la tensión del arco de mis cejas deberían maniatarte
adjudicarte
una estampa gris y borrarte los trazos con ácido
¿renunciar
a ser yo para ser una escritora?
demonizaron
lo gentil y lo esbelto de mi cuello y el
modo
en que nace el cabello en la parte baja de mi nuca en este
club
no admiten a chicas que anden tan bien arregladas
Desconfiamos
del verano
La
belleza corrompe.
Mira
bien si te compensa todo esto.
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