Un
flamboyán aquí
otro allá,
¿es un cenzontle el que canta?
"Un poema si no es una pedrada -y en la sien- es un fiambre de palabras muertas" Ramón Irigoyen
Lübeck,
1. Septiembre de 1939
En la cuarta silla
a la mesa del desayuno
se sienta hoy por primera vez la guerra.
Saltó desde la radio
al medio de la habitación
y tomó su lugar.
Esta es la guerra,
dice mi abuela.
Y mi abuelo asiente.
Pero mi pequeña madre,
Que ocho años tiene,
no entiende qué significa eso.
Hambrienta va,
dice mi abuelo, con gran hambre
y siempre con apetito.
(Y la última vez,
aunque mi abuelo prefiera no decirlo,
se comió a su hermano).
Pero lo que la pequeña quiere
en realidad saber hoy es:
¿viene el circo?
Y el padre rebusca
en el periódico:
¡el Circo Krone llega!
Con
veintitrés elefantes
y un gigantesco
espectáculo de monos.
Llega de Hamburgo
al mediodía a Lübeck
e ¡iremos mañana!
Sobre eso hablan todos
hoy en el patio de la escuela:
¡El Circo Krone llega!
Con veintitrés elefantes
y un gigantesco
espectáculo de monos.
(Ah es cierto, también con
Sigi, Waltraut y con Edith
se sienta hoy la guerra a la mesa del desayuno).
todo
es como de costumbre-a simple vista
la diferencia es mínima
o no existe/entre la casa
de ayer y la de hoy-espero
un poco luego continúo/el pequeño juego
del tiempo transcurrido
desde las piedras-alguien ha hecho la limpieza
-después de días sin hacer nada
ya no sé qué más debo hacer
El
hueco
Mis
versos dicen.
Hueco
único
sitio habitable.
Casas.
Casas.
Casas.
Huecos
interrumpidos por paredes y puertas.
Huecos
divididos en cuadros.
Mi
vida
mi
vida transeúnte
está
llena de las troneras
de
las horribles cavernas
que
las casas les hacen a los huecos.
Y ya
no puedo
borrar
en mí la sensación
de
los huecos de la ciudad
encerrados
en los cajones de los cuartos.
Qué
bien sé lo que quiero
Qué
bien sé lo que quiero: sólo un trozo —con rocas,
junto
al río Voltoya—de la provincia de Ávila.
Sólo
un trozo de monte de encinas y berruecos.
Sólo
un monte con grandes encinas distanciadas
en
sus faldas rocosas, amplias, largas y diáfanas,
muchos
días seguidos, antes de entrar en Ávila
(por
las calles prosaicas de las afueras, entre
madrugada
y conventos de clarisas, bernardas,
carmelitas
descalzas), con el alma descalza.
Sí,
ese trozo (con rocas y encinas) me prepara
para
la entrada en Ávila, me instala en su tardanza,
me
sujeta a su mucha claridad de horizonte,
me
quita de los ojos lo que todos prefieren,
me
deja en equilibrio de piedra caballera
y en
pujanza absoluta de azul sin importancia.
Es
un trozo tan alto de fatigas, tan fino
y
ocioso de matices, tan activo en suspenso
—a
pesar de la sombra creciente del barranco—
que
al llegar el crepúsculo no hacen falta campanas.
Es
un sueño perpetuo de nieve o sol de agosto
y
alegres margaritas de primavera escasa.
Es
un trozo —y un solo pajarillo que canta—
con
vegas del Adaja, y aun del Eresma, lejos,
y
cerca una pequeña ciudad amurallada.
¡Qué
bien sé lo que quiero!: quedarme entre sus rocas
y
encinas, oponiéndome a todo lo que sea
merma
o deformación política del alma.
VACA
MUERTA dice que soy hija de la honra,
mi cara es coraje
sed de raíz ceiba
ruina-Tajín
sacrificio-Cobá
cansada de los lamentos,
en las piedras de Chiricahua.
Si
yo tuviera la gema del silencio
buscaría tu cuerpo dulce
en mi entraña
pero ha muerto el mar,
el mar tibio y abierto de un corazón
intermitente
: me ha engañado la vida
con eso de aquí podía reinventarme.
Vaca
muerta dice que soy costra del aceite,
mi piel blanca es roja
herida por fuego y vidrio
herencia de redheads y patarajadas
enamorada entre las sábanas
blancas y el palo verde de Catalina.
A
Patagonia–Sonoita voy
voy con sus colibríes
a chupar las flores
que me ven llorar y se marchitan
me ven llorar las flores
cuando Vaca muerta dice mu
dice mu
mu
frente al granero de las papas
las pobres papas que nos calientan
: papa comemos los hijos de la honra.
Si
yo tuviera la gema del silencio
arrancaría la rama del árbol
que me recuerda tu nombre en el follaje,
ayudaría a cavar ese cementerio
donde renacen los halcones
de campo abierto a tu amor
gañiendo por Vaca muerta
que dice mu
dice mu
mu