"Un poema si no es una pedrada -y en la sien- es un fiambre de palabras muertas" Ramón Irigoyen
miércoles, 28 de agosto de 2019
ROBINSON QUINTERO
Conversando
con Antonio Deltoro
Qué
duda cabe:
una
cosa es un pájaro,
y
otra un ave.
A.
Deltoro
El
ave está en la luz
el
pájaro en el trasluz
El
ave está en el haz
el
pájaro en el envés
El
ave sueña la realidad
el
pájaro el sueño
El
ave es la austeridad
el
pájaro el esplendor
¡Qué
duda cabe!
Si
el ave es la rutina
el
pájaro la epifanía
Si
el ave canta el tiempo
el
pájaro el destiempo
ANTONIO ALIBERTI
Generaciones
Acurrucado
entre fajas sábanas
bulto bajo la colcha prendido a la almohada
(posición fetal)
pido a mi madre:
acaríciame la frente
no me dejes salir.
Pero están los hijos; duermen, sueñan
dicen:
despiértanos
queremos vivir.
bulto bajo la colcha prendido a la almohada
(posición fetal)
pido a mi madre:
acaríciame la frente
no me dejes salir.
Pero están los hijos; duermen, sueñan
dicen:
despiértanos
queremos vivir.
JOSUÉ VEGA LÓPEZ
décimo octava
a
jorge arturo ojeda
la
noche es un verso endecasílabo
ronco
esdrújulo olor de lo imperfecto
no
hay voz o pulso que oculte su efecto
de
potencia espesa máquina o clavo
en
la frente el centro exacto del verso
en
lo oscuro la claridad del sueño
vuela
en su luciérnaga lo pequeño
y
el ojo es el reflejo de ese anverso
la
medida quebrada en una boca
como
si un aeroplano una rotura
en
la mirada en la piel de la roca
que
en este sueño es piel de la locura
cayera
en esta imagen que se toca
se
masturba el tropo el sexo la
altura
De:”traiciones”
DENISSE VEGA FARFÁN
Preguntas por la sed
Preguntas
por la sed.
¿Y
qué podría decirte sobre ella,
más
que del seco golpe del remo en las domésticas aguas?
La
sed que te hace seguir, ingobernable topo,
cada
vez más abajo y más adentro
en
busca del temblor exacto de tu cuerpo,
dejando
tras de sí restos de piel en ruinas,
quebradas
garras en el fósil de la hoja.
Devolverte
con la primera desnudez a la superficie,
ése
es tu sueño.
¿Qué
podría decirte?, ¿si precede o no
al
desgarrón de nuestros padres,
o
está la respuesta en los innumerables astros?
La
sed por la que sabes medir la noche y sus poblaciones,
el
alba y sus apariciones reptantes.
Ésa
que te usurpa el nombre al final del poema
y
ofrece devolvértelo en la continuación de otro,
para
nuevamente arrebatártelo y esconderlo
en
una letra aún más profunda.
¿Qué
podría decirte sobre la sed?
Tú
que tienes, como yo, la frente hundida en las arenas.
RODRIGO PETRONIO
IX
Si
digo que sueño el ruido de las flores miento.
Me
pierdo en un enmarañado de imágenes.
Estoy
más allá de lo que pienso y más acá de lo que siento.
Todas
las alas de un mismo juego.
Todos
los rostros de un solo escenario.
Plumas
salvajes adornan lo loco.
Se
digo: sorbo ese velo-abismo.
Las
flores me tragan en sus orificios.
Estrellas
son patas. Estrías claras de la brisa.
La
sombra es la fuente de donde brota mi grito.
Degustación
oscura de la aurora.
Y
la belleza en la que me aniquilo.
De: “Dentro de la estrella
blanca”
Versión de Eduardo Langagne
ALBERTO DESTEPHEN
A veces los oídos necesitan una voz.
Duele el dolor
en delirios,
en ansiedad.
OH vacíos…
OH locuras de sueños,
Arrastrando a los labios de la noche.
Estamos a veces lejanos,
próximas a la derrota
perdidos de pura ansiedad,
de soledad
de sensualidad.
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