sábado, 12 de mayo de 2018


VIOLETA LUNA





Afuera de la trampa



Dejadme por favor vivir mi vida,
amándola,
mordiéndola,
quitándole el veneno,
limpiándola.
Dejadme que me salve o me condene,
dejadme que vomite,
que sangre,
que sonría,
que cante por el fin de tanta guerra,
que llore por la guerra de los fines.
Dejadme que en silencio
escriba en vuestra culpa una sentencia,
que borre la sentencia de la culpa.
Dejadme que me hunda,
que gima,
que flote en lo intermedio,
que sueñe,
que pueda en una esquina
pisar un alacrán inofensivo.
Dejadme cuantas veces
firmar cada recado sin mi nombre,
dejad que me equivoque,
Dejadme cuantas veces
firmar cada recado sin mi nombre,
dejad que me equivoque,
que llame con maldad al bueno malo.
dejadme simplemente
que cuente por decenas,
qué coma con la izquierda,
que te ame sin remedio.
Dejadme por favor vivir mi vida,
que escape,
que reniegue,
que grite por las lluvias que se enlodan,
que ría por el lodo que se enlluvia.
dejad, pero dejad
afuera de la trampa mi cabeza.


ADRIAN SOTO





Horizonte negro
(Morgennebel im Gebirge)



Estas lejanas montañas que miro
son los ecos brumosos de otras cimas
que resuenan inmensos en la roca;
y si me acerco a ellas con profundo anhelo
marchan, se alejan, montañas tras montañas azules…
como un eco va expandiéndose en la noche.

Ésta debe ser la forma de un dios:
cuando el horizonte se hace negro
y cae abismalmente sobre las montañas.


ALFREDO R. PLACENCIA





Bienvenido sea (II)



La tibia luz de la luna
la está besando en la sien.
No os acerquéis a su cuna,
idos yendo, leves auras, una a una;
dejadla que duerma bien.
Dejad que no más la luna
la esté besando en la sien.

Que no canten las palomas.
Que la cerquen con aromas
las manzanas y las pomas
de Salen.
Que se rieguen los sonidos
por el monte y por las lomas.
Que no canten las palomas,
que se estén en paz los nidos,
que la Amada duerma bien.


JAVIER ACOSTA





[A quien leyere]



Si pudiera saber dónde te encuentras
te llevaría estas palabras.


De: “Largo viaje al presente”



ISMAEL LARES





2



En este verso
hay un árbol,
debajo del árbol
un hombre,
el hombre está triste,
su tristeza
bautiza la noche.


De: “Cuatro historias” del libro “La rebelión del anónimo”

RICARDO MOLINARI





Mi pasión tiene la forma de un río apresado...

                                                                    A Luis J. Morganti



Mi pasión tiene la forma de un río apresado por
     el desierto,
como por una noche penetrante,
inmóvil.

Amor es abrir la arena con narcisos.
(Dejen mi rostro apoyado en el agua
hasta que se me enfríe la voz,
solitariamente.)
Deseo una corona abandonada por su cuello,
besar el aire de su cabello hasta llenarme de vacío
De otra vida.

Nadie sabe hasta dónde llega el destierro;
que hace la tarde con un clavel, con un día caído
     de mi mejilla.

el cielo es cielo, y yo estoy tan lejos,
como una lanza junto a una cota empañada
por los arroyos de la noche.  Ay, en un costado de la tierra,
     con un nombre sordo,
mojándome el cuerpo distraído.


Gualeguaychú, abril de 1937