sábado, 25 de septiembre de 2021


 

ROBERTO MALATESTA

 


 

Molino

 


Sobre el verde místico de una mañana de niebla,
como una aparición: un molino;
si nos acercamos a destrabar
la palanca que acciona el mecanismo de sus aspas
chirriaran en nosotros como almas
liberadas de un oscuro tormento.
El olor animal todo lo sume
en una infinita paz
de un mundo recién creado.
Pero ¿qué es un molino?
venimos de la ciudad donde todo zumba
y el óxido es execrable. ¿Cuánta agua
necesita un molino? Quizás
tanta como sueños necesita el hombre
y verdor para brillar más alto,
y viento para crujir como un loco, y paz
para arder bajo la luz.
Un molino, acaso un espejismo tan real
que cuesta tiempo y paciencia habituarse a él.
¿Es todo esto un molino?
Al menos comienza así:
un nudo de poesía
que no nos atrevemos a desatar
de un solo tirón,
una inmensa cuestión plantada
en las orillas de una gran lejanía.


HOMERO PUMEROL

 

 


Este poema

 

 

De vez en cuando vuelvo a leer este poema.
Me gusta, es corto y fácil de olvidar.
No tiene asunto, anda rápido, no tiene tiempo.
Uno llega al final buscando otra cosa.

 

 

PETER RILEY

 


 

Viernes


 
Elípticos enclaves en cumbres con pequeñas iglesias.
Franjas alternativas de piedras blancas y rojas.
Paloma que revolotea sobre la copa de un árbol,
verdecillo que canta desde el bosque. En algún otro lugar,
triste baile en parejas. Sólo hay
Un final. Una ventana circular
en un emparrillado de piedra blanca y roja.

 

 

LYUBA YAKYMCHUK

 

 

 

Descomposición


 
en el frente oriental no cambia nada
pues, he logrado entender que
a la hora de morir, el metal se calienta
y la gente se enfría

 
no me hablen de Luhansk
hace mucho que se volvió solo hansk
Lu fue arrasada hasta los cimientos
el pavimento se volvió carmesí

 
mis amigos han sido capturados
y me es imposible contactarlos
sacarlos de los sótanos
o desenterrarlos de los escombros
como en netsk

 
sin embargo, aquí te encuentras,
escribiendo poemas ingeniosos
moralistas, brillantes
hermosos como un bordado

 
no existe poesía sobre la guerra
sólo descomposición
únicamente letras
que producen un mismo sonido — rrr

 
Pervomaisk se ha dividido en pervo y maisk
en partículas de un flujo primitivo
la guerra ha terminado una vez más
sin que la paz haya llegado

 
¿dónde está mi deb, alts, evo?
ya no nacerán poetas en ese lugar
ningún ser humano

 
contemplo el horizonte
se ha reducido a un triángulo
los girasoles sumergen sus cabezas
en un campo seco y ennegrecido, igual a mí
he envejecido tanto
que ya no soy Lyuba
sólo -ba

 

GIANNI DARCONZA

 

 

Encuentro


 
Mi mirada se cruza por la calle
con los ojos despiertos de un pequeño
que la madre empuja en un carrito
me mira como mira el mundo
con esa exterminada maravilla
de quien quiere a sorbos beber todo
hasta que la botella se vacíe
Fija por un insostenible segundo
mi viejo rostro de ninja
de maleante de suburbio
y me pregunto entonces
si un día cuando ya sea grande
recordará como normal
toda esta gente por la calle
con el rostro envuelto con una mascarilla

 

 

 

ANTONIO LAU PIÑA

 

  


La cosa está así

 

 

Nos hacemos videollamada
desde ciudades que no son para nosotros,
nos decimos todo lo que salido mal
últimamente,
     pretender que todo va salir bien
     es más fácil que aceptar la derrota.

Resulta que Vincent se irá a Arizona
para estar con su mujer,
dice que la extraña
y que le haría bien
un nuevo cambio de aires.

Carlos sigue en lo suyo
en un negocio que no tiene ni pies ni cabeza
porque alguien le dijo alguna vez
que Estados Unidos
es la tierra de las oportunidades perdidas.

Mientras tanto yo estoy acá
en una ciudad de muerte
en la que no hay nada que hacer
a pesar de su inmensidad,
la bandeja de mi correo
se llena con mensajes que dicen
“not selected” de postulaciones
infinitas de trabajos que no quiero.

Alguien me dijo cuándo me mudé para acá:
“vas a la ciudad del fracaso”,
no lo entendí del todo entonces,
ahora lo hago,

cada vez está más cerca el final inminente
en la que todos nuestros fracasos
se juntarán en el final del mundo
y reconocerán sus rostros
con un poco de vergüenza
y lastima
por todo lo que perdimos y sacrificamos
en el camino
para llegar a ningún lado en específico.