FUERTE DE SAN MIGUEL, CAMPECHE
"Un poema si no es una pedrada -y en la sien- es un fiambre de palabras muertas" Ramón Irigoyen
sábado, 11 de mayo de 2013
GUILLERMO SEPÚLVEDA
La
tarde y ella
Desnuda
como estás sobre la arena
pareces
una tarde desnudada,
en
tu cuerpo la brisa enamorada
se
ha quedado besándote, morena.
Con
su lápiz el sol sobre la arena
ha
dejado tu sombra dibujada
y
junto a ti —de celos desmayada—
se
ha quedado la tarde, mi morena.
En
la ruta del viento prolongada
y
en el canto de un pájaro enastada
está,
de amor, flotando su bandera.
Si
no te vistes pronto, retardada
ha
de llegar la tarde, demorada
porque
eres tú la tarde verdadera.
DIEGO ALBERTO PINEDA
Tú
Tu
locura, tu cabello, tu sonrisa,
tu
ímpetu, tus labios, tu piel,
tus
ideas, tus ojos, tus manos,
tus
fantasías, tus dientes, tus senos,
tus
algarabías, tus dedos, tu lengua,
tus
deseos, tu sexo, tus piernas,
tus
palabras, tu cuello, tu ombligo,
tus
decaimientos, tus uñas, tu espalda,
tus
espontaneidades, tu fragilidad, tu cara,
son
el inventario que tengo de ti.
JORGE RAMOS SUÁREZ
VII
Te
pareces al mar
cuando
me cubres
con
tu ondulante silabario
de
nardos
y
nenúfares...
Caracol
astral
déjame
oír por siempre
el
ruido del mar
acunado
en
tu pecho
consiénteme…
ALFONSO OSORIO CARVAJAL
Z–
mar
Te
quiero así,
sencilla
como el agua,
como
el lucero azul
que
se quedó dormido
en
la frágil mañana.
Te
quiero así,
sensitiva
y lozana,
como
si fueras fruta
que
crece bajo el alba.
Te
quiero así,
con
tu sonrisa franca,
con
tu cara de niña
y
tu voz de campana.
Te
quiero así,
inquieta
y alocada,
como
el viento que juega
en
los patios del alma.
Te
quiero así,
con
tu verbo sin alas,
porque
con este amor
te
sobran las palabras.
Te
quiero así.
JORGE BUCKINGHAM
Nocturno
en gris
Es
otra noche sin sueño,
Creí
dejar atrás mi cadáver,
Con
inmaculada dulzura
Abro
inmensamente los ojos,
Y
la columna de mis días
Se
quiebra como fruta fresca.
¿Quién
podría ser ahora?
Sin
la memoria del calendario
Sopla
dardos de gloria en las pupilas.
Y
ya no recordaré mi nombre
Acurrucado
en la burbuja de tu cariño.
Es
otra noche sin muertes,
Parece
que los suspiros se escapan
De
nuestro panteón,
Sepultando
los gritos del limbo,
Para
disolver ciegamente el exilio.
En
cada frecuencia,
En
cada inútil secuencia,
El
frío desobedece al maestro;
Hay
temblores que humillan la infancia,
Son
líneas de guinda y…
Platos
humanos descienden
Marcando
los corazones:
Una
flama inmortal cruza la sombra infinita.
ALDO PELLEGRINI
He
encontrado el secreto de tus ojos
Mírame
busco
en el fondo del pozo la cantárida dorada
y
para salvar a la noche asesino a los noctámbulos
mírame
hasta el agotamiento de las fuentes
donde
el temblor se deshace
en
la inmovilidad de tus ojos
¿desde
qué día señalado por la ausencia de horas
has
dejado de creer en la noche?
el
amor es una forma de la maduración de los ríos
es
un pasatiempo vertiginoso al borde del abismo
y
tú has comenzado a caminar por la cuerda de mis sueños
a
embellecer la muerte de los pasos.
Para
que sólo tu luz me ilumine
ordena
que hoy sea el último día
ordena
que se derrumben las alturas
arranca
la blanca mancha del sol
de
otros ojos extraños que pasan.
Mírame
mírame
en la luz de un universo sin mundos
en
la luz de esa aurora feroz
mírame
con tus dientes
y
a través de la espuma
de
océanos interminables que nos acechan.
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