"Un poema si no es una pedrada -y en la sien- es un fiambre de palabras muertas" Ramón Irigoyen
jueves, 14 de abril de 2022
ALBERTO SERRET
¿Y qué olor tiene el amor?
¿Olor
a sangre que llega
y a leche humana, y a siega
de millo fresco, a dolor?
Sorbo de lirios, fulgor
que abreva en copas de vino,
a la mitad del camino
toma resabio en la piel
y en un adiós de papel
sin capitán ni destino
echa su rumbo marino,
igual que un ancla que sube
y que se clava en las nubes
con su furor peregrino.
¿Qué olor a clavo y comino
se le ha prendido al olor?
Su intransferible rumor
huele a manía de besos.
¿Qué muerte lleva en los huesos?
¿Y
la muerte, qué sabor?
RICARDO POCHTAR
Labios
partidos
bajo el sol
de las palabras.
Cántaros
de luz
que en el fervor
de los reflejos
ciegan la fuente.
Voces
sembradas
en el silencio
de las cosas.
BERNARD NOËL
Perillos
flores
de niebla en el río de aire
cubren poco a poco toda la vista
el espacio está preñado por la niebla del tiempo
Nota: Opoul-Périllos
en francés, Òpol i Perellós en catalán, es una localidad francesa.
ROLANDO CÁRDENAS
Yo solo se que vengo regresando
Nunca
fue mi tristeza más callada y tranquila
que cuando te encontré, viniendo desde el tiempo,
desde el fondo, desde años.
Siempre
fuiste como una conjunción de principios.
Nunca,
tal vez jamás,
podré tener esa actitud tranquila que tenía mi madre,
porque ahora soy otro.
Sólo el espectro es el que queda
con mi mismo ropaje,
con mis mismas palabras,
que buscan el oído, vacilantes.
Y es que no puede ser de otra manera.
Entraba por el alba como por una puerta
y me encontraba solo, hasta el alba siguiente.
Pero estaban mis libros,
unos, más queridos que otros,
que esperaban callados que yo los penetrara
con ojos de estudiante,
y ellos me mostraron el encantado mundo de las cosas.
Ahora
que regreso,
hacia las mismas horas que un tiempo
me llevaron de la mano por mi infancia callada,
las encuentro como si nunca hubiera existido.
Y ahí está mi amigo el árbol,
y esa misma calle,
un poco encorvada por la lluvia y la nieve,
más allá tengo a mi viejo amigo el mar
siempre acariciando a mi ciudad tranquila,
y los cerros lejanos,
y la flauta del viento que danza en las veredas,
el rostro amigo,
y la mano y la boca que sonríen
como final de tanto tiempo ausente.
Pero
no. No es posible.
Yo sólo sé que vengo un poco triste
y un poquito cansado
de tanto soñar con todos los crepúsculos que hoy toco con mis manos.
Pero yo te quería decir otras palabras,
y mirando esta tarde me fui por los ensueños y recuerdos como en una nave.
Yo
siempre quiero penetrar las cosas
y ser como ellas son,
incluso, más sencillo que la canción del agua.
Pero cuando converso con mis manos
no puedo evitar estar un poco más callado,
que es un modo de mi tristeza,
porque nunca estoy seguro de nada,
ni siquiera que existo en esta tarde azul,
ni siquiera que estás a mi lado
en la actitud callada de una flor.
De nada estoy seguro,
y ahora lo confieso, era eso,
precisamente eso,
que está presente desde antes que te viera,
sobre lo que quería conversarte.
…pero, es la tarde, hay mucho sol,
tal vez, mañana el alba te lo diga…
ZAHUR KLEMATH ZAPATA
Entre tu y yo
La
duda es tan sabia
nos interroga
y afloran a la mente tantas cosas
que no podemos responder
El tiempo abre heridas
que no sanan rápidamente
sangran hasta hacernos desangrar
Sólo nosotros nos pertenecemos
el futuro lo vivimos cada día
El miedo a morir apresura las respuestas
y cuando miro a tus ojos
descubro un mar de soledad
que me hace suspirar
Con el silencio basta
no necesitas hablar
pues el dolor es profundo
y es indeleble cuando lo descubro
Mi amor
se ha ido
Y mi yo
Ha volado en busca de refugio
donde el espacio si es mío
Ayer
lo dejamos escapar por nuestra torpeza
y los recuerdos quedaron grabados
como un leve gemido
Un cometa pasó
su estela salpicó nuestro interior
igual que un viajero
que se fue sin decir adiós
HUGO ACHUGAR
Himeneo
Azul tu sexo abierto, tu dulce y espléndida cosa,
de un azul increíble tus pálidas
acogedoras paredes carnosas.
Recorro tu piel con demorada lengua
marrón Leteo¹ maná muerte azul
cuando la noche llega a casa, salto en caída libre...
1.-
Leteo: En la mitología griega, Leteo es uno de los ríos del Hades (infierno).
Beber de sus aguas provocaba un olvido
