viernes, 23 de octubre de 2020

ROQUE ESTEBAN SCARPA

 

 

 

Los pájaros voraces

 



Esta noche está poblada de pájaros voraces.

No dejan miga del pan del sueño para el hambre mía.

Ni la gota de agua cautelosa para mis labios secos.

Ni el sonido del recuerdo tuyo para canción ni fábula.

Todo lo poseen esos pájaros voraces.

Sombras ignoro si son, pero en mí se infiltran

y me convierten en pájaro que de mí se aleja,

en voraz pájaro que me consume el sueño y el otro sueño,

y bebe el agua escueta y hurta el son ansiado.

Vuelo dentro de mí, sobre mí, y sin ala no vuelo.

La noche me he quitado, me he disipado el día,

Y no soy y no estoy, y tú, no me despiertas.

 

DINA POSADA

  


  

Orgasmo iii

 


Se calla la luz
el sonido se apaga

el aleteo de un grito 
deja caer sus plumas
en nuestro lecho

tus ojos desplomándose
sobre mi cuerpo vencido
me están escoltando al delirio



Versión de Susan Rascon

 

 

VLADIMIR HOLAN

 


 

Cita

 

 

Lluvia sin árboles... Húmedo heno...

Apertura del gas... Nube frita en la sartén de la luna...

Parpadeo... Guiño... Desparición de las formas...

Casi tropieza con la carretilla de tierra del cementerio...

"¿Me quiére usted?"   -Sí.

"¿Me ama?" -No.

 

 

Versión de Clara Janés

PIER PAOLO PASOLINI

  

 

  

Análisis tardío

(Fin de los años sesenta)

 

 


Sé bien, sé bien que estoy en el fondo de la fosa;
que todo aquello que toco ya lo he tocado;
que soy prisionero de un interés indecente;
que cada convalecencia es una recaída;
que las aguas están estancadas y todo tiene sabor a viejo;
que también el humorismo forma parte del bloque inamovible;
que no hago otra cosa que reducir lo nuevo a lo antiguo;
que no intento todavía reconocer quién soy;
que he perdido hasta la antigua paciencia de orfebre;
que la vejez hace resaltar por impaciencia sólo las miserias;
que no saldré nunca de aquí por más que sonría;
que doy vueltas de un lado a otro por la tierra como una bestia enjaulada;
que de tantas cuerdas que tengo he terminado por tirar de una sola;
que me gusta embarrarme porque el barro es materia pobre y por lo tanto pura;
que adoro la luz sólo si no ofrece esperanza.

 

 

Versión de Hugo Beccacece

 

OSIP MANDELSTAM


 


 

¿QUÉ PUEDO HACER con este cuerpo mío irrepetible,

que me ha sido dado?

¿A quién, dime, debo agradecer,

por la apacible alegría de respirar y vivir?

 

Yo soy el jardinero y soy la flor,

En la mazmorra del mundo no estoy solo.

 

En la eternidad del cristal ya se ha esparcido

Mi aliento y mi calor.

 

En él está impreso un signo,

Irreconocible hasta hace poco tiempo.

 

Ojalá la bruma se diluya en los instantes

Para que no borre el signo amado.

 

 

 

PIERRE LOUYS

 

 


El árbol




A un árbol, desnuda, subí cierta vez:
         la lisa corteza mis muslos asían,
         en húmedo musgo fincaba los pies.
Tan alto que, apenas, las hojas mojadas
         del sol me cubrían
         con sombra discreta,
         me puse a horcajadas
         en cómoda horqueta
         y balanceaba feliz, al desgaire,
         los pies en el aire.
De lluvia temprana, besando mi piel
         las gotas rodaban del fresco dosel;
         de zumo de flores bermejas tenía
         las plantas, y el musgo mis brazos cubría.
Y al soplo impetuoso
         del viento -al empuje de fuerzas internas-
         el árbol hermoso
         tremaba de vida...
Lo sentí de pronto, toda estremecida,
         y apreté las piernas
         y posé, entreabiertos, los labios en llama
         sobre la vellosa nuca de la rama.

 

 

De: "Las canciones de Bilitis"
Versión de Enrique Uribe White