"Un poema si no es una pedrada -y en la sien- es un fiambre de palabras muertas" Ramón Irigoyen
domingo, 26 de enero de 2020
EDGAR LEE MASTERS
Harry Wilmans
Acaba
de cumplir veintiún años,
y Henry Phipps, el director de la escuela religiosa,
leyó un discurso en el teatro.
"Hay que defender el honor de la bandera", había dicho.
"No importa que la ataquen salvajes tagalos
o la más grande potencia de Europa."
Y aplaudimos, y aplaudimos su discurso y la bandera
que hacía ondear.
Y fui a la guerra a pesar de mis padres,
y seguí la bandera hasta verla izada
junto a nuestro campamento
en un arrozal no lejos de Manila.
Y todos lanzamos ¡vivas! y la vitoreamos.
Pero había moscas y cosas venenosas;
y había esa agua que era fatal,
y el calor cruel,
y la comida pestilente, putrefacta;
y el olor de la zanja detrás del campamento
donde los soldados iban a vaciarse;
y había esas putas que siempre nos seguían
infestadas todas de sífilis;
y los actos bestiales entre nosotros o a solas.
con intimidaciones y odio, la degradación común
y los días de repugnancia y las noches de miedo
que llevaron a la hora de la embestida por la ciénega
infernal,
detrás de la bandera,
hasta que caí con un grito, de entrañas vaciado a balazos.
¡Ahora, en Spoon River, me cubre una bandera!
¡Una bandera! ¡Una bandera!
y Henry Phipps, el director de la escuela religiosa,
leyó un discurso en el teatro.
"Hay que defender el honor de la bandera", había dicho.
"No importa que la ataquen salvajes tagalos
o la más grande potencia de Europa."
Y aplaudimos, y aplaudimos su discurso y la bandera
que hacía ondear.
Y fui a la guerra a pesar de mis padres,
y seguí la bandera hasta verla izada
junto a nuestro campamento
en un arrozal no lejos de Manila.
Y todos lanzamos ¡vivas! y la vitoreamos.
Pero había moscas y cosas venenosas;
y había esa agua que era fatal,
y el calor cruel,
y la comida pestilente, putrefacta;
y el olor de la zanja detrás del campamento
donde los soldados iban a vaciarse;
y había esas putas que siempre nos seguían
infestadas todas de sífilis;
y los actos bestiales entre nosotros o a solas.
con intimidaciones y odio, la degradación común
y los días de repugnancia y las noches de miedo
que llevaron a la hora de la embestida por la ciénega
infernal,
detrás de la bandera,
hasta que caí con un grito, de entrañas vaciado a balazos.
¡Ahora, en Spoon River, me cubre una bandera!
¡Una bandera! ¡Una bandera!
LUCILA NOGUEIRA
XXXII
Es
tanto el dolor que el silencio es crimen
La
angustia es desde el hambre a la metafísica
América,
América, América.
Grito
tu nombre hasta romper los tímpanos
Somos
blancos y negros, somos indios
En
la sucesión de las vanas carnicerías
Atlántico,
Atlántico, Atlántico.
Tú
no separas mi poesía.
GEORG TRAKL
Rendición nocturna
¡Monja!
Enciérrame en tu oscuridad,
¡Tus
montes frescos y azules!
Un
oscuro rocío sangra allá;
La
cruz se alza contra el brillo estelar.
Purpúreas,
irrumpen boca y mentiras
Frescas
en una habitación ruinosa;
La
risa aún resplandece, juego de oro,
Últimos
trenes de una campana.
¡Nubes
de luna! Negruzcos caen
Frutos
silvestres del árbol por la noche
Y
el espacio se vuelve tumba
Y
sueño, esta terrena travesía.
PEDRO GANDIA
a W.H.
Dioses antiguos, ruinas
contra un aire invernal.
Mas tú has de ser modelo
de lo humano inmutable.
El tiempo, de infinitos
y turbulentos crímenes,
lejos de tus mejillas,
tu cintura, tus muslos,
tus cabellos, tus pies.
Mi rojo amor eleva
contra el glacial olvido
un obelisco en llamas,
memoria de tu imagen.
No he de temer mi muerte
pues en ti viviré...
(Así cantaba el Cisne
de Avon, mientras se hundía
en tierno y dulce niño.)
De: "Tríptico del Tiempo, la Belleza y la Muerte”
YANKO GONZÁLEZ
[flora kozmutza]
El
invierno se comió el corazón de attila józsef
Porque
cayó más lluvia de la que fui capaz de beber
Meses
y meses leyendo una página de bustriazo ortiz
Pensando
que la he escrito yo. Alguien habla por mí.
Alguien
habla por él. Cuando la nieve nos deje salir
Qué
pedirás. La casa vacía, como estaba ayer.
PAOLA R. SENSEVE T
4
al
fin y al cabo solo
nos
vamos repitiendo solo
somos
ecos del eco solo
somos
rocas del mar solo
que
van creciendo y solo
quebrándose
ninguna
novedad
mi
mamá
la
mamá de mi mamá
yo
y
la idea matemática
de
alguien más
solo
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