jueves, 26 de octubre de 2017


JOSÉ CORONEL URTECHO




Dos canciones de amor para el otoño



I

Cuando ya nada pido
y casi nada espero
y apenas puedo nada
es cuando más te quiero.


II

Basta que estés, que seas
que te pueda llamar, que te llame María
para saber quién soy y conocer quién eres
para saberme tuyo y conocerte mía
mi mujer entre todas las mujeres.


VÍCTOR MANUEL PINTO



Objetivo 2.b


Azul


El movimiento del agua más allá de la orilla
distinto al que va y viene
cambiando el color de la arena.

O los pensamientos de un hombre que no siente
en sus movimientos: irse y venir sobre su cuerpo
una mirada distinta.



ZAZIL ALAÍDE COLLINS




Todo mundo



Todo mundo dice que son palabras
y Palabra es un tambor
sentido piel
que se desgaja
en ardores
en brumas

Todo mundo gira
sube la vista a la Luna
y por dentro se sonroja y
grita:
¡Yoooooo!
[eco]

Sí, si miente el aire
el mar confunde
y presume sonrisas
caracoles que se agitan

Todo mundo sonríe como
el cartón y llora
en sus ojitos cuitados
el mundo es pobre todo
carga parches y enmiendas
en sus costados

Todo mundo se duele
escuchando el canto
que del alba se queda
en las miradas de
los que gimen y giran

Que las ruecas te pinchen
mundo mondo
de redobles y costuras

Todo mundo lleva existencia
de pasamontañas
lazarillos alfileres
y todo mundo dice que son palabras
y Palabra es un tambor
sentido piel
que se desgaja

Tiémblame mundo
porque todo mundo gira y tiembla
las olas que se agrandan
en los ecos
y de nuevo
yo
retumba
Redoble resuena
trueno
Tensada piel sobre la boca
de un cuerpo
Timbales
Todo mundo es tamborero
panteón de manos ensangrentadas
Ténsame mundo
el cuero de la piel
porque tiembla el eco



DANIEL ULLOA



  
Epílogo



Más que a la muerte, temo a los poemas que escribí,
la muerte es eficaz y conoce bien su trabajo,
no le tiembla el pulso ni se enreda en sentimentalismos.

Por mi parte,
ya hice una hoguera de papeles que me avergonzaban
y sé muy bien que no fue suficiente.

Lo único bello que encuentro en mi vida
es al gato pardo que he nombrado Neruda,
siempre está ahí durmiendo,
desentendido sobre mis cosas
y mi vértigo espiritual de ninguna manera le inquieta,
mucho menos el inoportuno odio de Aurelia,
quien me acusa de cosificarla,
de reducirla a un coño,
a una golondrina,
a un atardecer, que lento ante mis ojos
muere,
a estos versos
donde, por primera vez,
intenté la ternura.
Me acusa de ocultarme tras un silencio estúpido
e inútil
que tan sólo amplifica mi inmadurez
y pone en evidencia
lo lejos que estoy de vislumbrar
el alma femenina.

Neruda tirado ahí,
es pura elegancia y cuerpo en paz.

Tonto yo que envidio su dormir despreocupado,
tonto yo que me valgo de él
para terminar esta tontería de poema,
si es que a esta tontería puédasele tomar por literatura
o por simple cansancio mortal.




RAQUEL JADUSZLIWER




Visiones



¿Las ves?
¿las ves las ramas?
¿las ves? ¿de allá se ven?
las vueltas que da el viento en cada rama
¿de allá se ven?
no
no mires hacia el tronco
ni a la raíz perdida y sus terrones
ni a la rotunda piedra
que las cubra de olvido
el blando olvido
y para vos las ramas
las más altas de todas
las más altas
ay mi difícil
mi amor difícil de días más extensos
¿lo ves
¿lo ves allá?
¿lo ves al ángel torvo
blandiendo sus espadas?


De: “Persistencia de lo imposible”                                             


STELLA DÍAZ VARÍN


  

Albedrío



Yo soy la vigilia,
Ustedes
Son los hombres castigados,
Los labradores
De gestos oblicuos
Que al engendrar falsos surcos
La semilla huyó despavorida.

Ahora respóndanme
Con una mano enguantada
A flor de corazón.
Cuál es la fecha exacta
Entre Aldebarán y Andrómeda.
El día en que los cuervos
Cosechen lo suyo  entre las más grandes estampidas
De todos los tiempos. Amén.