sábado, 17 de diciembre de 2022


 

ANAT ZECHARIA

 

 

El mundo verdadero

 

 

Yacíamos una junto al otro
tocándonos rodillas, muslos, manos
pudimos hacer un hijo
multiplicarnos con tanta fe
en ello.
Y podía haber dicho: alabada sea la rutina,
pero siempre quise ir al bosque
Arrojar de mí la manta y decirle a alguien:
toma por favor lo que te corresponde.
Suelto a los perros
atrapo ciervos de gran cornamenta
mato y pierdo
(y me apuro mucho quiero ir al bosque)
Aquí hay demasiado café, comida china,
demasiados chinos y deseos
de decir cosas brillantes
Aquí me falseo, me fustigo
me siento bien.
Ser simpática con todos
me va bien
a ojos de los hombres soy o asexuada
o interesante.
(Y me apuro mucho quiero ir al bosque)
Aquí correr para adelante es una muerte lenta
con pretensiones deportivas.
Humillan y halagan,
nada se vuelve más bello
con el tiempo
Y si finalmente alguien/tú pregunta
¿adónde vas ahora?
Al bosque
a bailar bailar bailar.

 

ADELE DESIDERI

 

 

Miedo

 

 

Pez fuera de agua
que sobresale.

Ansia de prestación.
Tribunal del Omnipotente
sentencia.

Lobo de la estepa:
curia
incesante
imprescindible.

Pronunciada ya la condena.

Indefendible.
Derrota.

Remordimientos.
Sacrificados afectos
omisión
deberes.

Anamnesis
desvergonzada rechaza
la asimilación.

Inclinada subida
piedra fría me oprime
pero no interrumpo el paso.

Miedo: demencia

Rea:
imposibles acciones
tiempos no
orejas sigiladas.

Por quien amo.
Porque amo.

Miedo: desfallecer de tedio.

Yo, miedo.

Intelecto,
creación,
bahía profunda.
Obstinada
hacía el holocausto.

Código de honor
me vincula.
Oprime.
Ansia mutila el cerebro
Asfixia del alma.

Has desaparecido.
Sin Nombre.

Furia:
prueba capital,
despedaza el cuello.

Caminabas sobre aguas
legendarias…

Trampa para ratón
yo misma era la roedora.



De: “Non tocco gli ippogrifi”

Versión de Carlos Sánchez

 

ROSAMEL DEL VALLE

 

  

Aproximación

 

 

Asómate a la raíz de mi sangre que pasa entre la madera
Dormida por pasos que la siguen hasta morir.
Habita fatigada la sombra de sus habitaciones donde el tiempo
Cierra todas las puertas.
Oh, país de un sonido largo como una luz a lo lejos,
Acércate a mi oído que tarda en despertar.
La crueldad de esta estrella que nada debajo del agua
Es tu voz fija en un instante sin existencia segura,
Algo más adentro de mi imagen errante que atraviesa las puertas cerradas.
Quítame las sienes de los vidrios y quítame las manos del fuego.
El calor de tus luces destruye las sombras y los vapores donde la muerte hace su nido.

 

 

JAVIER BOZALONGO

  

 

Duermevela

 

 

Ahora que no dormimos como antes,
y en el silencio oscuro contemplamos al otro
cual espectro nocturno atizando vigilias.

Ahora que los años nos hicieron mayores
sin cedernos a cambio aprendizaje alguno.

Ahora que los años nos hicieron más fuertes
cuando apenas tenemos ya de quien defendernos.

A tu lado ya sé que tendré nueva luz.
Enigmática luz, tan clara y pura
que tan sólo se ve en lo que desvela.

 

LUIS OYARZÚN

 

 

Olvido

 

 

Perdí ya el goce del dolor que dieras,
perdí tu tempestad, gané el olvido.
Aquel vuelo afiebrado halló su nido
y no me importa ya que no me quieras.
Viví con el terror de que te fueras,
ahora ya no sé si al fin te has ido.
Si nunca te gané, que te he perdido
sé con seguridad. Ya no hay esperas.
La cuerda tensa sin pensar se corta
y la abeja volando se fatiga.

 

 

MARÍA LEFEBRE LEVER

  


Humo

 

 

Mientras yo me desnudo
con desgano y pereza
va surgiendo entre encajes
mi soberbia esbeltez,
Y hay como un aleteo
de la luz en la pieza
cuado frente a la lámpara
se alza mi desnudez.

Mientras yo me desnudo
vas urdiendo quimeras
las axilas, los pechos,
las esbeltas caderas,
hacen que en el reposo nocturno
más me adores.

Y mientras en un sueño fantástico
me sumo, me vas viendo
a través de las volutas de humo
como en un cuento de Rabindranath Tagore.