"Un poema si no es una pedrada -y en la sien- es un fiambre de palabras muertas" Ramón Irigoyen
jueves, 17 de abril de 2025
JOSÉ LUIS DÍAZ CABALLERO
Disfraz
Pero
Atenea,
este
disfraz de mendigo
que
me sugieres
no
es disfraz,
sino
la piel inquietante
que
se me impuso
en
los albures de la guerra.
De: “Atlas
en rojo”
OLGA AZABAL D
Hay
un punto en la noche en el que corro.
Hay un punto en la noche en el que corro,
Madre.
La madrugada es un estallido
un rugido de hielo.
Caes,
te subo a mi espalda
y no paramos nunca
y no llegamos nunca
sólo trazamos surcos
en sorda huida.
De: “Un
silencio blanco”
ALDA MERINI
Ahora
que veis a Dios
Si
tú callas
más allá del mar
si tú conoces
el ala del Ángel
si tú dejas la madre tierra
que te ha devastado tanto
ahora puedes decir
que está la tierra del pobre
la tierra del poeta
toda ensangrentada por la soledad
y ahora que ves a Dios
reconoces en ti mismo
la flor de su lengua.
OLALLA CASTRO
II
Desde
que salimos de Greenhithe
siento este iceberg pegado a las palabras.
De lo que pienso se desprende la nieve
que rueda cuerpo abajo y golpea mis pies
antes de amontonarse al filo de la cama.
Tengo miedo.
Pensamientos dentados
nadan a mi alrededor trazando círculos
cuando llega la noche.
Puedo ver asomarse sus aletas.
Hay algo cuarteado
en la mirada triunfal del capitán Franklin,
algo en el optimismo de la tripulación
que hace aguas.
Los buques en los que avanzamos
dibujan sombras gigantes en la escarcha.
En esta tierra
donde nadie pronuncia la palabra progreso
nuestros barcos son un par
de criaturas monstruosas
que navegan muy juntas:
dos ballenas
con estómagos repletos de personas
que a su paso abren rendijas en el hielo.
Somos solo estos monstruos
que parten en dos un mundo que tirita
y lo dejan atrás, como si nada.
LI BAI
Bebiendo
solo a la luz de la luna
Entre
las flores, un tazón de vino
bebo solo, ningún amigo está cerca.
Levanto mi copa, invito a la luna
y a mi sombra, y ahora somos tres.
Mas la luna nada sabe de bebidas
y mi sombra se limita a imitarme,
pero así y todo, luna y sombra serán mi compañía.
La primavera es época propicia para el goce.
Canto y la luna prolonga su presencia,
bailo y mi sombra se enreda.
Mientras me mantengo sobrio, somos alegres juntos,
cuando me embriago, cada uno marcha por su lado
jurando encontrarnos en el Río de Plata de los cielos.
FRANCISCA AGUIRRE
Última
nieve
A Pedro García Domínguez
Una
hermosa mentira te acompaña,
pero no llega a acariciarte.
Sólo sabes de ella lo que dicen,
lo que te explican libros enigmáticos
que narran una historia fabulosa
con las palabras llenas de significación,
llenas de claridad y peso exactos,
y que tú no comprendes sin embargo.
Pero tu fe te salva, te mantiene.
Una
hermosa mentira te vigila,
aunque no puede verte, y tú lo sabes.
Lo sabes de esa forma inexplicable
en que sabemos lo que más nos hiere.
Llueve
desde los cielos tiempo y sombra,
llueve inocencia y loco desconsuelo.
Un incendio de sombras te ilumina,
mientras la nieve apaga las estrellas
que una vez fueron permanentes ascuas.
Una
hermosa mentira te acompaña;
a infinitos millones de años luz,
intacta y compasiva, se extiende la nevada.