"Un poema si no es una pedrada -y en la sien- es un fiambre de palabras muertas" Ramón Irigoyen
sábado, 4 de noviembre de 2017
ÁNGEL CARLOS SÁNCHEZ
24
En esta tierra hay alacranes,
hambre, desiertos, injusticias,
paramilitares, ejército,
cuerpos policíacos
que quieren darnos miedo,
que tratan de obligarnos
a creernos felices.
Y tenemos políticos
que son la voz del pueblo
para hacer agua tóxica
de todo lo que hablan.
Y arriba,
quienes deciden colores y espejismos
para suplir con ellos el paisaje,
no se interesan mucho por nosotros:
nos ponen en sus listas
de capital pasivo.
La globalización nos va reuniendo
en el fondo de los días.
Sé que tu mundo
está rodeado
por iguales abismos.
No nado hacia tu isla como un náufrago:
busco tu mano entre la niebla
para descubrir
qué podemos hacer juntos.
En esta tierra hay alacranes,
hambre, desiertos, injusticias,
paramilitares, ejército,
cuerpos policíacos
que quieren darnos miedo,
que tratan de obligarnos
a creernos felices.
Y tenemos políticos
que son la voz del pueblo
para hacer agua tóxica
de todo lo que hablan.
Y arriba,
quienes deciden colores y espejismos
para suplir con ellos el paisaje,
no se interesan mucho por nosotros:
nos ponen en sus listas
de capital pasivo.
La globalización nos va reuniendo
en el fondo de los días.
Sé que tu mundo
está rodeado
por iguales abismos.
No nado hacia tu isla como un náufrago:
busco tu mano entre la niebla
para descubrir
qué podemos hacer juntos.
De: “Migraciones”
ALEJANDRA LERMA
Y si la Muerte
¿Y si
la muerte no es más que ir vagando
arrastrado la imagen de este cuerpo
sintiendo las angustias
los dilemas
todo lo que en la vida nos dolió?
arrastrado la imagen de este cuerpo
sintiendo las angustias
los dilemas
todo lo que en la vida nos dolió?
¿Y si
la muerte no es más que sombra y rabia
un silencio feroz que nunca cesa
un estar todos juntos y distantes
sin podernos tocar sin abrazarnos?
un silencio feroz que nunca cesa
un estar todos juntos y distantes
sin podernos tocar sin abrazarnos?
¿Y si
la muerte no es tan desconocida y se parece al rostro de mi madre cuando llora?
Y si la muerte no va a volvernos sabios
ni apacibles
ni locuaces
seguiremos cargando la misma estupidez
el odio
la amargura
Si ese paisaje hermoso
poblado de vestidos blancos
no existe más que en cuentos
¿qué haremos de la muerte, dónde la encontraremos, cómo esperar por ella?
¿Y si la muerte es lo mismo que la vida?
Y si la muerte no va a volvernos sabios
ni apacibles
ni locuaces
seguiremos cargando la misma estupidez
el odio
la amargura
Si ese paisaje hermoso
poblado de vestidos blancos
no existe más que en cuentos
¿qué haremos de la muerte, dónde la encontraremos, cómo esperar por ella?
¿Y si la muerte es lo mismo que la vida?
MARGARITA MEJÍA
Oración a la sal
Sal
marina redentora
si es verdad que purificas
y tienes poder para sanar
haz que la marea
derramada por mis ojos
lave mis malos augurios
riegue el mundo
lo transforme
y lo malo
se lleve lejos.
si es verdad que purificas
y tienes poder para sanar
haz que la marea
derramada por mis ojos
lave mis malos augurios
riegue el mundo
lo transforme
y lo malo
se lleve lejos.
ANGÉLICA HOYOS GUZMÁN
Oleaje
No hay
motivo
para
que las olas
no dejen sus hondas heridas
en el agua.
Así se
limpia el mar.
Después
de la tormenta
saca la madera muerta,
renace
desde el fondo.
ANGELA VALLE
Tus manos proletarias
Tus
manos adoradas que me han vuelto casta,
Llena de la pureza de las alas mas diáfanas,
Aromada del albo blancor que entre las sabanas
Se esconde y reposa silente en las almohadas.
Manos, morenas tuyas que afanosas trabajan
Y diseñan las líneas del mortero en las casas
Y dibujan los marcos de luz en las ventanas.
Esas manos tan fuertes que así me enamoran
Son las que sostendrán nuestros hijos mañana
Cuando por tus caricias en mi, más tarde nazcan
Llena de la pureza de las alas mas diáfanas,
Aromada del albo blancor que entre las sabanas
Se esconde y reposa silente en las almohadas.
Manos, morenas tuyas que afanosas trabajan
Y diseñan las líneas del mortero en las casas
Y dibujan los marcos de luz en las ventanas.
Esas manos tan fuertes que así me enamoran
Son las que sostendrán nuestros hijos mañana
Cuando por tus caricias en mi, más tarde nazcan
ADRIANO DEL VALLE
Luces de la ciudad bajo la noche
A Rafael Consinos-Assens, gran Maestre del
«Ultra»
Luces.
Rosas de luces que se encienden
en explosiones silenciosas
hasta irrumpir en las retinas
en mil fracasos,
multiplicados por los horizontes
y por el inmenso estuario
azul
del mar.
Rosas de luces que se encienden
en explosiones silenciosas
hasta irrumpir en las retinas
en mil fracasos,
multiplicados por los horizontes
y por el inmenso estuario
azul
del mar.
Luces.
Luces que surgen,
suavemente,
o bien con el ímpetu estelar
con que fluiría la sangre
a los miembros que hubiesen sido cercenados
sobre un tajo de estrellas.
Luces que surgen,
suavemente,
o bien con el ímpetu estelar
con que fluiría la sangre
a los miembros que hubiesen sido cercenados
sobre un tajo de estrellas.
Luces
que se sumergen en el río,
y tiemblan,
como flores de légamo,
o como rojas pupilas de borrachos
que vomitasen vinos hediondos
desde los pretiles de los puentes.
y tiemblan,
como flores de légamo,
o como rojas pupilas de borrachos
que vomitasen vinos hediondos
desde los pretiles de los puentes.
Luces
que brotan a la vida nocturna,
en los cristales y en las torres,
como rescoldos de la hoguera
purpúrea del crepúsculo
en que murió la tarde,
voluptuosamente
en los cristales y en las torres,
como rescoldos de la hoguera
purpúrea del crepúsculo
en que murió la tarde,
voluptuosamente
[...]
por los
rayos del sol
herida por las jabalinas temblorosas
de los relámpagos del estío.
herida por las jabalinas temblorosas
de los relámpagos del estío.
Luces
de la ciudad
que irrumpen en la noche
ya poblada por el zumbido
de las mil abejas del silencio.
que irrumpen en la noche
ya poblada por el zumbido
de las mil abejas del silencio.
Luces
que surgen en la sombra
como rosas de sangre
que fuesen extravasadas por las lunas
de las ánforas plenas
puestas en los intercolumnios de las vírgenes.
Luces de las constelaciones
que son como las mamas prodigiosas
del torso azul de Urania
que rezuman estrellas encendidas
sobre los vastos finares y los ríos.
como rosas de sangre
que fuesen extravasadas por las lunas
de las ánforas plenas
puestas en los intercolumnios de las vírgenes.
Luces de las constelaciones
que son como las mamas prodigiosas
del torso azul de Urania
que rezuman estrellas encendidas
sobre los vastos finares y los ríos.
Luces
misteriosas de San Telmo
ebrias sobre los mástiles,
que están como empavesados con estrellas.
Luces que en las cúpulas son pájaros
de rotas alas temblorosas,
nostálgicos de sol bajo la luna
y ansiosos de partir en un gran vuelo,
sobre los naranjos y sobre las salinas,
en la fresca mañana ribereña,
que traerá más luces aún
en las blancas banderas de la aurora...
ebrias sobre los mástiles,
que están como empavesados con estrellas.
Luces que en las cúpulas son pájaros
de rotas alas temblorosas,
nostálgicos de sol bajo la luna
y ansiosos de partir en un gran vuelo,
sobre los naranjos y sobre las salinas,
en la fresca mañana ribereña,
que traerá más luces aún
en las blancas banderas de la aurora...
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