Soltando trenzas
Ahora que la vacilación te come tu destino
y el hilo que te pende se ha cortado,
ve a buscar las trenzas que has tirado
al río que un día era océano,
como una isla de tu propia soledad
destrenza nuevamente los hilos de la memoria
y abre la tríada cinta de tus trenzas sueltas.
y el hilo que te pende se ha cortado,
ve a buscar las trenzas que has tirado
al río que un día era océano,
como una isla de tu propia soledad
destrenza nuevamente los hilos de la memoria
y abre la tríada cinta de tus trenzas sueltas.
Ya sabes que a oscuras el cielo
se toca con los dedos mojados
y las piernas húmedas son orillas de playa
cuando la piel es un naufragio que resiste las olas.
Caballitos de mar abandonando una calesita
que nadie subirá
apenas la voz es una lengua que baja y se encadena
donde nace otra lengua
otro dedo otra mano otro rostro
mientras afuera llueve a cántaros
y aquí dentro mojados hasta el alma
como huesos empapados a la intemperie del tiempo
terminan por anudarse a una trenza imaginada
que se hunde en el río.
se toca con los dedos mojados
y las piernas húmedas son orillas de playa
cuando la piel es un naufragio que resiste las olas.
Caballitos de mar abandonando una calesita
que nadie subirá
apenas la voz es una lengua que baja y se encadena
donde nace otra lengua
otro dedo otra mano otro rostro
mientras afuera llueve a cántaros
y aquí dentro mojados hasta el alma
como huesos empapados a la intemperie del tiempo
terminan por anudarse a una trenza imaginada
que se hunde en el río.
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