sábado, 5 de mayo de 2018

AUDOMARO ERNESTO





Noches

y siempre
a media noche más cerca de la soledad que de la dicha.
Jorge Fernández Granados



A esta hora
la casa se ilumina con la costumbre de posponer el sueño

Abajo la estela audible de los últimos vagones

Algo hay siempre en acecho
que nos obliga a decir aquello que otros temen
aquello que también somos
como un antifaz invisible que llevamos puesto

Me acerco a la ventana
Allá la luz que miro y cae despacio
ilumina muros y árboles
luz que no es del tamaño de nuestras manos

A esta hora
todas las ciudades son iguales
y cada uno es sobreviviente de su destino


No hay comentarios:

Publicar un comentario