Playa sáfica
Encima
de esta tarde que transita,
dos
soles doblan reflejos al borde
hasta
descubrir otro amanecer,
tú
siendo niña.
Atrás,
de espaldas, vamos con el tiempo
arrastrando,
en los pies, la luz al sol
de
ambos horizontes que ya se encuentran.
Día
de espejos.
Regular
el adiós en el camino
nunca
o siempre lo testifica el polvo,
más
allá somos el doble del sol,
el
día peregrino!
No hay comentarios:
Publicar un comentario