Despedida matutina
Al rodear el cabo de pronto vino el mar,
Y el sol examinó la silueta del monte:
Allí estaba un camino de oro para él,
Y el deseo de un mundo de hombres para mí.
Y el sol examinó la silueta del monte:
Allí estaba un camino de oro para él,
Y el deseo de un mundo de hombres para mí.
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