La mayoría
Y ese
es el resumen de toda
la
morralla que hay en el mundo.
La
mayoría dicta las normas morales
y se
adjudican la autoría
de
los principales avances
tecnológicos
y artísticos
de la
actualidad.
Sin
darse cuenta han llegado
todos
a un
acuerdo sobre el camino predefinido a seguir
por
las generaciones venideras.
Lo que ellos recorran son los kilómetros y la
ruta adecuada
para
conseguirlo; conseguir formar parte de ellos
y su
secta tan bien difundida por todo el globo.
No
caigamos en eso amigo.
No
debemos tropezar con aquella roca inmensa
que
continuamente te ponen delante
cuando
vas a comprar fideos
o
cuando vas a devolverle sus cosas a tu ex mujer.
Te
intentan implantar a la fuerza un camino fácil y directo
para
llegar a alguna cima de medio metro
y
poco más.
Lo
verás todo sencillo
y
simplemente deberás limitarte a andar,
pero
es tan transitable porque no hay nada
y es
aburrido y mecánico,
y
tendrás que bajarte los pantalones
como
hace la mayoría
y
buscarte granos o imperfecciones
porque
ellos recurren a generar problemas donde no los hay
y a
la iglesia
y a
los eventos deportivos
y a
la televisión
y a
buscar a su alma gemela
y a
la ufología
y a
buscar al Bigfoot
porque
se aburren y
no
tienen mucho más que hacer.
Y sí,
también lamen el culo a los que nos atrevimos
a no
pasar por el aro,
a los
que no formamos parte de la mayoría, y
no sé
tú,
pero
no estoy seguro de tenerlo impecable
para
sus lenguas.
No lo
reviso como hacen ellos,
tengo
mejores cosas que hacer.
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