11
Para
saber si el fruto de su vientre
ha de ser varón o niña, que tu mano
inaugure la sombra de sus ojos, y
que pronuncie un nombre sin
recordar la noche de la sangre.
Si ella dice: rueca, o: golondrina,
será mujer quien alegre tu casa.
Si dice, por ejemplo: amaranto,
será varón quien besará
a la madre. Si queda muda,
no te apenes, él hablará por ella:
que nacerá un poeta.
ha de ser varón o niña, que tu mano
inaugure la sombra de sus ojos, y
que pronuncie un nombre sin
recordar la noche de la sangre.
Si ella dice: rueca, o: golondrina,
será mujer quien alegre tu casa.
Si dice, por ejemplo: amaranto,
será varón quien besará
a la madre. Si queda muda,
no te apenes, él hablará por ella:
que nacerá un poeta.
De: “La carne contigua”
No hay comentarios:
Publicar un comentario