miércoles, 1 de noviembre de 2023

RODRIGO ZÚÑIGA

 


 

Memento mori


 

Veamos,

Lenny tenía razón,

el mundo no desaparece

al cerrar los ojos,

y hay mundos y vidas

que aún existen

cuando atizamos el humo

que sale de los recuerdos

 

Hay verdades

que pedimos

que se acuerden

de nosotros,

y otras que ardan

por los bosques

del olvido

y no quede cicatriz;

pero es cierto,

uno finge, hace

lo que se puede,

para enfrentar a tientas

la sombra

de las bofetadas

que nos da el destino

 

Puede que sí,

que los hechos,

las pruebas sean

mejores bisagras

que la memoria,

sean el mejor bastón

en la oscuridad;

por eso, tomamos

y quemamos fotos,

escribimos

y tatuamos direcciones,

instrucciones

y poemas en la piel

para recordarnos

quiénes somos

y quiénes fuimos,

una vez que al pasado

se ha prendido fuego

 

Pero a qué precio,

Leonard,

a qué precio; nos hemos

estado mintiendo,

inventando a Sammy,

como yo a Lenny,

un hermano,

un padre no nacido

para correr y escondernos

en el propio itinerario

en que nos hemos

convertido

 

No se olvida

por repetición

 

Lenny tenía razón,

todos nos engañamos

y nos decimos

esa palabra justa

que sirve como

un pedazo de papel

a una mesa coja

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario