I
La
bestia abrevará en los vados
estando
el capullo dormido
donde
no espera muerte
en
noches inevitables
Traduce
voces que no entiende
pide
esperanza sobre deseo
La
Palabra seguirá el curso del campo perfumado
arrollará
en su impronta manos que se elevan ciegas
monte
creado para equivocar
Los
árboles serán olas y barcos de luciérnagas que zarpan
en
visión de viento sinfonía de semillas hacía otra tierra
Mas
brazos negados pedimento en vano serán al huérfano
Tormenta
nunca vista sembrará de restos la llanura
pasado
el tiempo de los huesos
nuevo
pasto crecerá
Ni
sol, nubes, agua, día, manantial de estirpe
beso
nuevo, solo manto de miedo y soledad espera
crepúsculo
de nuevas dimensiones
Hombre
cegado de cuajo
en
luz que brota de la nada hasta morder su rabia
otra
vez rumia falsa expectativa
tasa
rumbos en peregrinar desierto
No
cesa de ofrecer pobres visiones
ni
alcanza copas moribundas
el
reto de besar los alcatraces
Gracias por compartir Samuel, pues tu bondad, de alguna manera, me une a la tropa de voces que coleccionas aquí. Y yo que nada soy como poeta, disfruto esto y lo presumo, entusiasmado como niño. Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarIgualmente, recibe un fuerte abrazo de quienes elaboramos este espacio y que estamos orgullosos de contar con voces como la tuya en el, gracias siempre.
ResponderEliminarAgradecido!Y admirado por el esfuerzo! Saludos!
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