7
Y
este secreto evidente que debemos vivir,
y
este olor a ovejas y quimeras que invadimos
como
el agua que ha de quemar la sangre
gimiendo
en la pradera desierta de la vida;
y
este barco que se hunde junto al mar,
y
esta Itaca en la que ancla todo el mundo,
y
este muerto vivo que hierve en nuestras sienes,
y
este cuerpo que se ovilla para no sentir
la
escarcha que inmoviliza el meollo de las cosas,
tiene
que matarnos, amigo, ahogarnos en la poesía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario