Herencia
Ella
sólo sabe hacer amasijos
con hilos rugosos, de colores desencajados
se fue quedando enredada en ellos
ahora cuesta encontrarla
le
fueron quitando sus dedales sus uñas
la arena resecó sus labios y solo hubo silencio
la sal se ha fijado a sus huesos
la ha paralizado
las
tardes pasan en la fábrica de amasijos
del tono de la luz que se fuga
teje y desteje las razones de su luna viajera
y cada sonido se enlaza con el odio
sigue
en sus horas mezclando lo innombrable
hilos entretejidos sin forma específica
en
una habitación
aún puede escuchar su infancia
a veces asomaba el rostro
entre las rejas
y soñaba con tesoros escondidos
en el patio de abajo
ella
sólo sabe hacer amasijos de azul
se enreda y deja de moverse
se complace en quitarse trozos de memoria
porque aun le queda el silencio y la luz tenue
una
mujer sigue buscando su luna
en el silencio de una tarde que se duerme
busca un hilo de luz para seguir tejiendo
De:
“Infancia, amor mío”
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