La
belleza afilada en la garganta de la puerta
No
olvido tu rostro, nunca
Mi
persona se santifica, creo en el negro de tus manos, siempre
Yo
vine oscuro a que me vieras, a ver si no fui yo el que mató al hombre
Mi miedo es la medida de las
cosas
Yo
sufrimiento no, acaba, la palabra no puede ser sangre
Yo
necesito acabar esto
Necesito
que este grito acabe
No
sé acabar; las estrellas me dicen que no
Que
si es posible
Les
creo
Los
árboles me dicen que les crea, que las estrellas son mi madre
La
locura es tener muchas madres
La
locura es la belleza afilada en la garganta de la puerta
“Mide”
–“Tú no sabes medir”
La
oscuridad puede ser un cerebro
Un
cerebro de balas incorpóreas, de rosarios de bala
Mi
pensamiento tiene la forma de una bala en tu cerebro
Yo
nací atravesando tu cuerpo al cruzar la calle
Yo
te miraba desde el ojo rojo del semáforo pensar en tu hermano
Te
vi pasar desde el gato solitario por la avenida Montparnasse pensando en tu
hermano
Yo
soy tu hermano
Yo
soy la calle mojada que pisas
Me
enamoré una vez y era agua y no quisieron recibirme en un cántaro
En
un ánfora, o en una bolsa como un pececito naranja
Me
dejaron caer al suelo
Soy
un charco que refleja los árboles de la calle
Soy
un charco
Soy
un charco como un muerto en la calle
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