La memoria del
pequeño César
hace tiempo
que dejé hablando a mis padres solos
tumbé la puerta que era mi boca
tumbé la puerta que era mi boca
y salí
de prisa
con las botas bien puestas
con las botas bien puestas
-aprendí
a alcanzar la caja de cereal de puntitas
sin usar silla ni escalar la alacena-
sin usar silla ni escalar la alacena-
ya no
soy el mismo gatito que no salía de tu cuerpo
tengo bigotes y ronroneo
malas palabras
tengo bigotes y ronroneo
malas palabras
cuando
vi tu boca lo supe todo:
le guardé el respeto suficiente para no venirme en ella
le guardé el respeto suficiente para no venirme en ella
(a mi
favor tenía una buena zurda
útil para el box el béisbol
y para mí)
útil para el box el béisbol
y para mí)
pateando
un bote vacío en el camino me he dado cuenta
que no he vuelto a preguntar por droga
ni he agarrado un catarro bajo la lluvia
que el sol no es el buen amigo que decía reyes
que no he vuelto a preguntar por droga
ni he agarrado un catarro bajo la lluvia
que el sol no es el buen amigo que decía reyes
le
perdí la confianza a los libros de borrachos
no eran manuales de vida
mucho menos literatura
no eran manuales de vida
mucho menos literatura
quizá
el tiempo dio la razón y no saldrían
rosas de entre mis costillas:
rosas de entre mis costillas:
no todo
es miel sobre hojuelas
hay que
darle al fuego lo que es del fuego
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