jueves, 14 de octubre de 2021

JAVIER TEMPRADO

 

 

 

Medina Azahara

 

 

Marchaos. Necesito estar solo unos minutos.
Preciso detener la vida aquí,
dejar que se concentren la memoria
y los años, que a veces pasan con rapidez.
Voy a seguir sentado en esta parte
del camino, sin más oficio que observar
cómo cae la tarde, cómo se va apagando
su incendio pasajero y su fulgor.
Cuando llegue la noche y los minutos se extiendan,
seguiré aquí, sobre este resto
de los años, mirando de frente esta ciudad,
su palacio, su ruina y su derrota,
sin que me encuentre el miedo o el olvido.
Si amanece, podré completar mi tarea:
dejar que llegue el verbo
y poder nombrar esta soledad.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario