viernes, 4 de septiembre de 2020

SOMA*




Mi diminuto mundo



El mundo es un disparo.
El mundo es una caja de música sin cuerda,
un juguete sin baterías.

Todo es oscuridad,
pero nada más oscuro
que el presentimiento de lo terrible,
la silueta atrás, el aliento
repleto de abejas envenenadas.

La noche es lenta,
pero nada es más lento
que yo intentando levantarme.
Pronto, desisto.
El camino hacia la ventana
es demasiado largo.

La oscuridad tiene hambre.
Me saborea. Es una lengua el frío.
Esta noche ya no es posible
la primavera ni el verano.

No florece la vida
sobre la tierra muerta.



Seudónimo de Laura Elena Vega

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