sábado, 20 de julio de 2013

MANUEL DURÁN



La lluvia 


Sólo la luz de la tarde,
el brillo celeste que cae,
loco, rendido,
corriendo hacia mí mismo,
la luz que se va de viaje, que salta
de la orilla de una nube
a la orilla blanca de la calle
con la tristeza inconsciente
de un árbol
de luz que se deshoja. 


De "Ciudad asediada"


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