Un sueño
Soñé
que al fin tu corazón latía;
Que
al fin me amabas como yo te amaba;
Que
en tu caliente seno, vida mía,
Mi
fatigada frente reclinaba.
Soñé
un mundo de amor y de delicias,
Donde
aspiré, como en hermosas flores,
El
aura embriagador de tus caricias...
¡Es
tan ingrato soñar con tus amores!
Loco
mi pobre corazón amante
Sintió
el calor de juventud perdida;
Gocé
tanto, mi bien, en ese instante
Que
bendije lo hermoso de mi vida.
Soñé
una dicha delirante, loca,
Que
tu amor me embriagaba hasta el exceso;
Que
acercaba mis labios á tu boca
Y
temblando de amor, te daba un beso.
Evoqué
mis marchitas ilusiones,
Toda
la fe que al adorarte siento;
Que
unimos en un ser los corazones,
Que
confundí mi aliento con tu aliento.
Que
yo apretaba contra el pecho mío
El
tierno y palpitante de mi amada....
¡Después!...
después, al despertar sombrío…
¡Estrechaba
en mis brazos una almohada!
No hay comentarios:
Publicar un comentario