domingo, 11 de enero de 2015

SALVADOR NOVO

 

XV
 

Me dije: "Ya por fin la vida mía
el objeto encontró de su ternura;
es él quien llenará con su dulzura
para todos los siglos mi alegría".

Pero un año pasó desde aquel día;
monótona tornóse mí ventura,
y vi junto a su carne prematura
huerto en sazón que mieles ofrecía.

Déjame en mi camino. Por fortuna
ni el Código Civil ha de obligarte
ni tuvimos familia inoportuna.

El tiempo ha de ayudarme a subsanarte.
Nada en mí te recuerda —salvo una
leve amplitud mayor— en cierta parte.

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario