Una piedra en lugar del corazón
Podría
poner una piedra en lugar del corazón,
y
seguiría dando saltos de rana sobre tu mirada,
te
tocaría Señora Mariposa,
con
débil arpa de huesos,
te
pintaría una noche estrellada,
de rojo
oxidado y espeso.
Si
dejas de mirarme,
se
convertirá en tormenta de arena,
si no
dejas de mirarme,
se
abrirá paso a través de piel y huesos.
Tócalo
para morir de amor,
déjalo
caer para convertirme en un recuerdo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario