domingo, 16 de noviembre de 2025

LUCILA ESTRADA DE PÉREZ

 

 

A una flor sin aroma

 

 

¿De qué sirve, bella flor,
que ostentes tanta belleza,
si falta a tu gentileza
el perfume embriagador?

Si la brisa que al vergel
acaricia juguetona,
de ti no lleva el aroma,
como de rosa o clavel.

Creyendo aspirar olores
Se acercan a ti las aves
mas no hallan perfumes suaves,
sólo tus bellos colores.

Y se alejan, y a otra flor
humilde, pero aromada,
la avecilla enamorada
da sus cantares de amor.

Eres tú, flor sin olor,
como la joven hermosa,
de faz de nieve y de rosa,
de aire dulce y seductor…

Que ufana con su hermosura
lo más precioso descuida:
la virtud, bien de la vida,
perfume de una alma pura.

1890.


Publicado por el “Diario del Salvador” el lunes 15 de enero, 1906.

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario