Centro
del Mandala
Alabado
sea tu hoyo, cosa que vive,
grande es el humo que no me llega,
todo lo que te late me palpita y tumba
armándome vencedor de los quicios rotos.
grande es el humo que no me llega,
todo lo que te late me palpita y tumba
armándome vencedor de los quicios rotos.
He
aquí tu himen, amada muerte,
por él maté a las últimas
manos que me saludaban.
por él maté a las últimas
manos que me saludaban.
Alto
como el mejor asesino,
mentí mi vida
mientras el mundo me veía
crecer y hacerme.
mentí mi vida
mientras el mundo me veía
crecer y hacerme.
Ahora
en tu boca pasto y bufo,
duermen los buitres que merodean mi lengua,
no hay desiertos tan dulces
como tu cueva.
duermen los buitres que merodean mi lengua,
no hay desiertos tan dulces
como tu cueva.
No hay comentarios:
Publicar un comentario