Apagamiento
Tantos
años arrancando
de los rincones de nuestras casas
un color inconfesado, una línea descubierta,
un pendiente vilo
menos hueco
que el anterior.
Ya
no oro
ni me abrasa
el mermado salón de aquella noche.
la que dormita
dirigiendo las voces
que han callado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario