Si
hija de mi amor mi muerte fuese,
¡qué parto tan dichoso que sería
el de mi amor contra la vida mía!
¡Qué gloria que el morir de amar naciese!
¡qué parto tan dichoso que sería
el de mi amor contra la vida mía!
¡Qué gloria que el morir de amar naciese!
Llevara
yo en el alma, adonde fuese,
el fuego en que me abraso, y guardaría
su llama fiel con la ceniza fría,
en el mismo sepulcro en que muriese.
el fuego en que me abraso, y guardaría
su llama fiel con la ceniza fría,
en el mismo sepulcro en que muriese.
De
esotra parte de la muerte dura,
vivirán en mi sombra mis cuidados,
y más allá del Lethe mi memoria.
vivirán en mi sombra mis cuidados,
y más allá del Lethe mi memoria.
Triunfará
del olvido tu hermosura;
mi pura fe y ardiente, de los hados,
y el no ser por amar, será mi gloria...
mi pura fe y ardiente, de los hados,
y el no ser por amar, será mi gloria...
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