miércoles, 7 de mayo de 2025

DIEGO MOLDES

 

 

 

CXXXII

 

 

Los días se abren paso

entre preguntas y cuerpos,

lugares de nuestra infancia,

playas y pubs de la adolescencia.

La memoria son los despojos

de nuestro olvido.

Era un mundo insaciable,

joven, dorado, vivo y ardiente,

días que se alejan fugaces

presos de deseos y sueños,

anhelos imposibles, inmensos,

que cabían en un puñado

de arena, en un whisky DYC

o un ron con coca-cola.

 

De: “Ni un día sin poesía”

 

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario