Al fondo de otra casa
El
otro lado, a veces, me parece
que llegará hasta el fondo de mi casa.
Una bombilla, al centro, iluminaba
aquello que se ve posiblemente.
Una mesa tal vez, que se presume;
una silla también, sobre sus huellas.
y encima de la mesa un vaso de agua
parecía no estar, quizá flotara.
Aquel largo pasillo desemboca
en una habitación igual a tantas
que no existen, que hay en parte alguna.
A travieso el pasillo, sin haberlo;
llego a la habitación, en apariencia;
y contemplo la mesa, el vaso de agua
encima del espacio inexistente.
Están al otro lado. Allí no hay nada
colocado en su sitio, a la manera
de como se sitúan por aquí.
Es un orden distinto. Muy borroso.
Allí, el vaso de agua, se me ofrece
como líquido aire, que bebía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario